National Rifle Association (Photo credit: Wikipedia)
Obama 'sacó la patita' y, tras la masacre de Connecticut, pronunció un tímido discurso en Newtown en el que afirmaba que 'esto se tiene que acabar, tenemos que cambiar'.
Y hasta ahí puede leer. Alguna reforma le dejarán introducir, pero...
Obama no podrá hacer nada por variar el derecho a la defensa que el pueblo norteamericano tiene insertado en su propia cultura y en su Constitución. Y menos podrá aún con la Asociación Nacional del Rifle (que ha escondido su página en facebook y mantiene silencio en twitter desde el pasado viernes), un lobby importantísimo que financia a demócratas y republicanos.
NRA (Photo credit: the|G|™)
He aquí otro ejemplo más, de los muchos citados en CEC, de que los políticos no pueden cambiar nada en algunos casos. La frase 'la política es el arte de lo posible' es muy bonita, pero irreal, y una gran mentira más. Se nos ha vendido, en muchas ocasiones, que el presidente de Estados Unidos es el dueño del mundo, y ni ese dueño puede con el Dios real de nuestro planeta: el dinero.
En muchas películas y series lo hemos visto: para el norteamericano es sagrado el derecho a la auto-protección, formando ésta parte de lo que entienden como su propia libertad. La propia ley dicta que si ves a una figura amenazadora merodeando por tu hogar, puedes pegarle un tiro. ¿Mentalidad americana? ¿Tradición? ¿Hecho cultural?
NRA Commemorative Coin (Photo credit: formatted_dad)
No, La palabra clave es Lobby. Este tiene un peso específico brutal y determinante en la política de los EEUU. Hay zonas de Wahington con cientos de lobbies, uno al lado del otro. Algunos tienen sus intereses en el objetivo de defender su parte de interés en el presupuesto público (contratos, ayudas, etc...) y otros, en lugar de ir a "chupar", van a deteminar la política pública.
Los del Rifle se encuentran en este segundo grupo: ellos, y también los fabricantes de armas (cada año se venden millones de armas en el conjunto del Estado) más la subvención a demócratas y republicanos, hacen que, en este caso, como en tantos otros, la política deje de ser el arte de lo posible.
Muchas personas, de todo el mundo, no entienden cómo puede ser que ocurran estas masacres, y porque no se hace nada por cambiar esta situación. Es lógico que no lo entiendan pues, mientras haya armas, este tipo de masacres seguirán ocurriendo, volveremos a abrir este debate, y Obama sacará la otra patita...
English: List of NRA weapons (Photo credit: Wikipedia)
Los propios norteamericanos agotarán todas las vías que se les ocurran, como reforzar los análisis psicológicos de los ciudadanos, antes que renunciar a las armas. El hecho de que el autor de la masacre tuviera, presuntamente, el síndrome de Asperger, les irá como anillo al dedo y justificará lo injustificable, olvidando las armas que había en ese hogar, y dándole la culpa a la enfermedad.
Y otros muchos, de aquí y de allá, seguirán acudiendo a las urnas confiando en que, a aquel al que le den el voto, tenga todo el poder para hacer y deshacer en cualquier tema, gracias a la sobrevalorada y ficticia democracia.
Volvemos, sin embargo, a llegar a la misma conclusión de siempre. No hay democracia, sino lo que nosotros llamamos 'demogogia', y en este mundo hay un único Dios. Hay que irlo aceptando y memorizando, y saber en qué mundo vivimos. Este es un ejemplo más, pero muy gráfico, que siempre podemos recordar cuando utilicemos la lógica para explicarnos cómo funcionan las cosas. Las cosas funcionan siempre igual cuando el ser humano está de por medio: por parámetros económicos y en su defecto ideológico, cueste las vidas que cueste.
