Vernon Subutex es el próximo estreno de FilmIn España. Una serie de 9 capítulos original de Canal Plus basada en una novela de 3 tomos de Virginie Despentes publicada en ediciones Grasset a partir de 2015.
En esta historia, el anti-héroe principal, Vernon Subutex (Romain Duris), es un antiguo vendedor de discos parisino expulsado de su domicilio por un retraso de 16 meses en el pago del alquiler como consecuencia de la quiebra de su tienda: La legendaria "Revolver" que vio nacer a Alex Bleach (Athaya Mokonzi), actualmente un talento musical de gran renombre.
Vernon se ve de patitas en la calle el mismo día del concierto de Alex en París. La primera noche la pasa en compañía de Bleach pero entre raya y raya de cocaína, a éste le da por suicidarse dejando su testamento grabado en 3 cintas de vídeo.
Tras haber pasado por comisaría para testificar, Vernon se verá obligado a contactar a sus viejos amigos uno a uno, usando la muerte de Bleach como pretexto para verlos. Su principal objetivo es no obstante, lograr pasar la noche bajo techo y no quedarse en la calle.
En paralelo, el rumor de que existe un testamento grabado en video de Bleach se esparce como la pólvora con un especial interesado, el productor de cine Laurent Dupalet (Laurent Lucas). Con el fin de encontrar las famosas cintas de vídeo, Dupalet contacta con "La hiena" (Céline Sallette) una rastreadora de personas y chantajista profesional.
CRÍTICA DE LA SERIE VERNON SUBUTEX - CEC SERIES
Vernon Subutex, interpretado correctamente por Duris, es un tipo al que podríamos calificar, siendo muy amables, de cara dura, sinvergüenza, egoísta parasitario y desagradecido que pretende vivir a costa de los demás.
A la vez, es un tipo libre, despreocupado con síndrome de "Peter Pan" que quiere seguir llevando una existencia de veinteañero a sus 47 años. Nada que objetar, nosotros mismos somos un poco Subutex en este aspecto pero sin vivir a costa de nadie. Lo que molesta del personaje principal no es tanto su "modus vivendi" sino el nulo concepto de responsabilidad y la poca consideración que muestra. Profundizando en el análisis de su carácter, acaba siendo "ni chicha ni limoná". Subutex es un espectro tanto en aspecto como en presencia que deambula caritativamente con una carita dura que se vuelve odiosa.
En el periplo que ocupa a Vernon, que es básicamente el de encontrar una cama donde pasar la noche, desfilan toda una serie de personajes que no sabemos exactamente qué mensaje pretenden comunicar al espectador.
El otrora rebelde Xavier Fardin (Philippe Rebbot) domesticado por una noble burguesa con la que comparte una hija, una perra Collette (Bulldog, FRANCÉS, eso sí) y una vivienda. No sabemos quién pasea a quién: el hombre a la perra o la perra al hombre. ¿Es Fardin una muestra de los restos de Mayo del 68? ¿En esto nos convierte la comodidad, el tiempo o la madurez considerada adulta?
La camarera Céleste (Adèle Vismes) solía acompañar a su padre, de la misma edad que Vernon, a "Revolver" y allí aprendió a amar la música Punk. Ahora es tatuadora y Subutex no tiene ningún tipo de problema en prestar su piel para un tatuaje o lo que sea con tal de pasar la noche en su casa.
El turno pasa a Emilie (Emilie Gavois-Kahn), a la que también utiliza para descolgar un habitación gratis. Emilie, no obstante, ante las inoportunas insinuaciones amatorias de Subutex, se siente utilizada y le recuerda que tuvo que pasar años de terapia para aprender a cerrar la puerta ante situaciones como esta. Durante toda su vida, a nadie le ha importado nunca su vulnerabilidad.
Vernon rebota en casa de Sylvie (Florence Thomassin) una ex-novia de Alex Bleach que todavía no ha podido superar, a pesar de su avanzada edad, la ruptura. Lo que a Sylvie le ocurre es una caricatura más o menos acertada de la mujer clásica que se vuelve loca cuando es abandonada por su marido e hijo adulto y no encuentra en quién depositar la atención. Y aparece Vernon... El rosario de la Aurora se queda corto.
Una habitación de hotel, una casa de lujo propiedad de un tal Kiko amigo de una amiga, una chavalita que busca las famosas cintas para terminar en la calle. Lo que Vernon no sabe es que la "hiena" lo persigue junto a medio París, media Barcelona... una actriz porno, un transexual o dos, una hija ilegítima musulmana en busca de su madre, las cintas de Bleach...
Poco a poco Vernon Subutex va perdiendo el norte, tanto la serie como el personaje y cada vez la historia se va haciendo más surreal. Especialmente a partir del quinto capítulo. Empieza bien, flaquea y termina en un ¡¡¡WTF!!! dejando un profundo sentimiento de "¿Y esto qué c*** ha sido?"
¿Lo mejor? La banda sonora con su marcada personalidad que no retoma la misma música de siempre. Lo peor es la degeneración de la dirección que van tomando los acontecimientos cada vez con menor sentido.
