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Martes, 17 Mayo 2011 00:56

Cuando Gerónimo asesinó a Bin Laden

Escrito por  Publicado en La columna de SUAO
Geronimo (Goyathlay, 1820–1909), a Chiricahua ...

Image via Wikipedia

Gerónimo. Jefe indio de los apaches de Norteamérica que luchó contra el ejército de los Estados Unidos y contra el Gobierno Mexicano, con el fin de preservar el modo de vida y las costumbres de su pueblo, ante la invasión de sus territorios y la expulsión o aniquilación de sus gentes, por parte de los ejércitos de esos dos países.

Gerónimo, nacido en 1823 y fallecido en 1909, se ha convertido con el paso del tiempo, en uno de los grandes iconos de la lucha por la igualdad de las razas, las culturas minoritarias con respecto a las mayoritarias y, sobretodo, en la lucha por la preservación de la naturaleza, el medioambiente, las especies animales y vegetales y las culturas heredadas de nuestros antepasados.

Su vida no fue fácil. En 1859 el gobernador militar de Sonora ordenó asesinar a su mujer, a sus hijos y a su madre, en una de esas batidas que llevaban a cabo para "mantener a raya" a los insurrectos aborígenes. Aquello le marcó tanto que juró venganza. Se asoció con el jefe de los apaches chiricahua y juntos atacaron Sonora, dando muerte a muchos soldados enemigos.

Cuando murió Cochise, el jefe de los chiricahua, Gerónimo fue nombrado como nuevo jefe de la tribu. En 1876 le quisieron obligar a quedarse en una reserva, pero él rechazó la propuesta y se marchó a México, donde comenzó a arengar a los suyos a no dejarse intimidar por el hombre blanco, a no permanecer encerrados en reservas como si fuesen animales o prisioneros.

En 1886, tras una nueva fuga de una reserva, y acompañado por una treintena de apaches más, se dió orden de busca y captura, enviándose a unos 5000 soldados estadounidenses a darle caza, que era casi un tercio del ejército norteamericano de la época.Cuando dieron con él, Gerónimo decidió entregarse, siendo separado de los que le acompañaban  y llevado a cumplir condena en una cárcel de Sonora durante 3 años. Pasado ese tiempo, lo trasladaron a una reserva en Oklahoma, impidiendo así que pudiese volver a ver a su pueblo. Allí murío a los 85 años de edad, después de haber sido considerado por las autoridades, lo que en aquellos tiempos se llamaba, "un indio ejemplar", debido a su buen comportamiento.

Bien, pues cuando ya han pasado 102 años desde la muerte del gran guerrero, cuando ya cualquier pequeño rastro de su cultura ha sido llevado a la mínima expresión, cuando ya el hilo genealógico del gran jefe indio se revela inexistente, resulta que los Estados Unidos de América, en un alarde de originalidad y pasotismo total y absoluto, van y le ponen a una misión, en la cual se tenía que acabar con la vida del terrotista más buscado de todos los tiempos, el nombre de Gerónimo, haciendo gala de un desconocimiento de su propia historia, que no sólo los pone en evidencia a ellos por su acción, sino por su incultura (al menos la del lumbreras que decidió que ese nombre era el necesario para una misión así).

Resulta inevitable preguntarse, ¿qué hubiera dicho Gerónimo si aún viviese y descubriese que le han puesto su nombre a una acción militar para asesinar a otra persona? ¿Qué creéis que le parecería que su nombre fuese asociado al asesinato premeditado de un hombre que, por otro lado, luchaba contra los mismos que él luchó (salvando las distancias temporales, políticas y demás, claro)?

En absoluto quiero que se me malinterprete; no pretendo hacer de Bin Laden un santo ni tampoco decir que los Estados Unidos son los malos de la película. Sólo quiero poner en relieve una inquietud que tengo con respecto al nombre que se le puso a la misión que acabaría con Osama.

No entraré a valorar si se merecía un final como ese o si se le debió haber juzgado, tal como manda la legalidad. No me corresponde a mí juzgar si la acción del ejército estadounidense estaba justificada, por la cruzada que mantiene Occidente contra el terrorismo internacional.

Tan solo creo que si el Gran Jefe Gerónimo fuera consciente de lo que han hecho con su nombre, es posible que un escalofrío le recorriese la espalda y alguna lágrima se deslizase por su mejilla. Pues, al final, Gerónimo no luchaba más que por el derecho de su pueblo a vivir como siempre lo habían hecho hasta que llegó el hombre blanco. Esa es la diferencia entre él y los actuales combatientes.