La primera vez que me enganché a Salvador Dalí, el enganche me duró ¡10 años!
Tiempo después y nuevamente enganchado, tal vez ya jamás vuelva a desengancharme...
Sí, la primera vez que me enganché a DALI, no fue porque hubiera visto una exposición suya y me hubiera impactado su imaginativa pintura, ni por mi afición al surrealismo, ni tampoco porque me sedujeran sus increíbles y metafísicos cuadros. Nada de todo esto: lo que me atrapó de él fue simplemente un libro, titulado VIDA SECRETA de Salvador Dalí, escrito por él mismo.
Un libro que me enganchó de tal manera que me llevó a leer otro -y otro y otro y otro, de este o sobre este-, porque, para el que no lo sepa,
Salvador Dalí fue también un magnifico escritor, incluso mejor escritor que pintor según él mismo acostumbraba a decir, y no solo un genial escritor sino que, con su extraordinaria imaginación, consiguió plasmar en su obra literaria un mundo único e irrepetible, un viaje directo al inconsciente de la mente de quien lo lee, un mundo en el que confluyen lo filosófico, lo mitológico, lo científico, lo metafísico y lo mundano, todo junto sin la menor contradicción, y además, todo escrito en un lenguaje tan sensato como irónico, tan lleno de humor como sentencioso, donde la mentira o ilusión se convierten en auténtica realidad y pura verdad.

Portrait of Man Ray and Salvador Dali, Paris (Photo credit: Wikipedia)
Un tipo de literatura inclasificable y que yo considero un milagro, un rara avis dentro del mundo de la creación literaria, por la inabarcable cantidad de posibilidades y significados que entraña su lectura. Lectura y pensamiento que hoy es digna de investigación, como así y a tal fin se creó el Centro de Estudios Dalinianos.
Sí, yo me enganché a los libros de Dalí como un puto yonky con el primer chute de sus libros. Y digo como un puto yonky porque nunca en una sola dosis (de lectura) he disfrutado tanto, me he partido tanto de risa y he podido filosofar tanto, las tres cosas a la vez, como leyendo la genial obra literaria de Salvador Dali.
Luego ocurrió lo que ocurrió: adquirí y leí absolutamente toda la obra literaria del mismo, editada principalmente y de manera magistral por la Fundación Gala Dalvador Dalí, además de complementarla con todo lo que sobre él encontré por ahí y un tiempecito amplio pasado en las mejores bibliotecas de arte leyendo inéditos y descatalogados libros, imposibles de encontrar en otros lugares que no fueran estas bibliotecas, un trabajo completado con el visionado de todos los documentos gráficos y visuales que sobre él hay grabados por ahí.
Lo dicho: ''¡10 años!"

The Dali Atomicus, photo by Philippe Halsman (1948), shown before its supporting wires were removed. (Photo credit: Wikipedia)
Y digo que del ultimo enganche no me desenganchare nunca, por que no tengo la menor intención de hacerlo', pues una nueva experiencia en el universo daliniano me lleva así a intuirlo...