Las nuevas tecnologías (y los interesados que las mueven) nos invitan a la acumulación, con todo tipo de facilidades (a veces obligatorias).
Un montón de cosas que sólo nos despistan mientras las necesidades básicas van quedando fuera de nuestro alcance.
Aunque usted no lo crea o le parezca raro tanto,usted como un servidor y gran parte de la sociedad estamos a punto de estar sufriendo un grave trastorno mental conocido como "Síndrome de Diogenes". Si es que no lo sufrimos ya...
Dicho trastorno, según la psiquiatría, describe aquella perturbación mental que sufren las personas que no pueden parar de acumular cosas y más cosas.
"¿Y donde esta la acumulación?" se preguntará usted, si su casa esta limpia y despejada como una patena (bueno, habría que revisar sus armaros, ropa, cajones...).
Pero bueno, en principio le creo, aunque permítase que revisemos juntos ciertos hábitos para ver si esto es del todo cierto...
En primer lugar, encienda su PC, su portátil y su Tablet. Y, a continuación, abra en cualquiera de esos aparatos su correo electrónico. Vaya ahora a la carpeta de entrada y mire cuantos correos electrónicos tiene, cuantos le llegan a diario, cuantos tiene acumulados y cuantos guarda "por si acaso le sirven para algo..."
Compruebe ahora en dichos dispositivos (pc, portátil, tablet, etc...) cuantos archivos, documentos, páginas sugeridas, favoritos, ofertas, anuncios, links, enlaces con noticias, etc..., guarda o tiene acumulados porque pensó que le podrían servir para algo...
Vayamos ahora a su terminal móvil. Enciéndalo, abra cualquiera de esas dos aplicaciones que usa a cada instante (me refiero a wasap o messenger), y mire cuantas conversaciones, recuerdos, cotilleos, chistes, video montajes, enlaces, etc... guarda "por si acaso quiere volver a echar un vistazo"...
Sigamos en su terminal móvil: abra ahora su galería de imágenes y mire cuantas fotos acumula, cuantas hace a diario, cuantas le llegan en cadena, cuantas reenvía, cuantas hace a díario, cuantas se le descargan por si mismas y acaba guardando, como recuerdo... o por si acaso.
Abra ahora su aplicación de Instragarm y mire cuantas fotos y videos guarda, cuelga o sigue de otras personas. Sí, aquellas que le llegan mediante una notificación que le avisa de que las tiene acumuladas...
Vayamos ahora a la pantalla de su smartphone: observe cuantas apps tiene instaladas y guarda para cosas que quizás le pueden ser
útiles para algo (aunque luego no las utilice ), y que mantiene instaladas "por si acaso le sirven para algo"...
Vayamos ahora a sus aparatos reproductores y de almacenamiento: su TV, video, DVD, Tablet, Ipod, Pen drive, CD, Disco duro, nube, etc... Revise ahora su videoteca y mire cuantas películas, series de Tv, documentales, información, etc..., acumula en estos con la
intención de verlo o rememorarlo "por si acaso algún día tiene tiempo".
Haga más o menos lo mismo con su YouTube, y mire cuantas sugerencias acumula o le llegan a diario de ver videos, canciones, documentales, tendencias, personas influyentes, o miles de cosas más que sigue y le interesan. Cosas, por tanto, acumuladas en
espera de ser visionadas nuevamente por usted.
Vayamos ahora a esa red u redes sociales que sigue y abre a cada rato. Compruebe cuantas notificaciones tiene acumuladas o le llegan
cada día, cuantos mensajes de otras personas esperan ser vistos por usted, cuantos posts sube, cuantas noticias y comentarios propios
y de los demás acumula usted en su muro personal....
Y un detalle importante: no es que usted lo acumule (que también) sino que se le acumula por si mismo, por defecto, porque así están diseñados estos sistemas, aunque usted no quiera.
Y este es solo un detalle de los múltiples de esta cultura tecnoacumulativa en que estamos inmersos, una cultura de la sobreabundancia visual, de desbordamiento informativo. Una cultura que no la elegimos del todo, sino que nos viene impuesta -por defecto- por sistemas informatizados logarítmicos perfectamente diseñados para que a cada click de nuestro tiempo, a cada nueva visualización, deje un suculento beneficio a quienes los han diseñado.
Una cultura acumulativa no ya material, como algunos elegiríamos si nos dejaran (o sea, acumular coches, mansiones, yates, montañas
de dinero algunos, y pensiones, vivienda, salario dignos, prestaciones sanitarias básicas y un largo etc otros...), sino de acumular montañas de visualizaciones de cosas que no sirven para nada, mientras que de lo otro, lo fundamental y lo básico, vamos quedando fuera.
http://www.culturaencadena.com/series/noticias-series-2020-2021/vuelve-csi-una-de-las-franquicias-mas-exitosas-de-la-television-de-las-2-ultimas-decadas-2-interpretes-muy-queridos-de-la-franquicia-estan-en-negociaciones-avanzadas-4.html