Ya que se ha hablado de Metallica, de muertes, del magnetismo que ambos factores produjeron en un momento y lugar, y que además actuarán el 11 de julio en Barcelona como cabezas de cartel del festival Sonisphere junto a otros grupos como Slipknot, Mastodon o Lamb Of God, es hora de ir abriendo boca y recuperar esta completa crítica aparecida hace algun tiempo en otra página web sobre su último disco "Death Magnetic". Lo primero que salta a la vista es que "Death Magnetic" es un disco tremendamente largo. El tema más corto del disco es precisamente el último, "My Apocalypse", que dura algo más de 5 minutos, y a partir de ahí casi todos duran de 6 minutos para arriba.¿Quiere decir esto que es un disco aburrido? Para nada. Hay temas que se pasan volando a pesar de su largo minutaje, y otros que por sus características sí que llegan a hacerse pesados (después lo detallaremos en el tema a tema), pero en el global sí que hay que decir que es un disco largo que, según cada cual, puede llegar a cansar. En cuanto a la música se refiere, bueno, tengo que decir que he vuelto sobre todo muy esperanzado con el grupo, pues salta a la vista que los de San Francisco, guste después o no guste, han hecho un disco con mucha pero que mucha personalidad y único en su discografía.
Nada que ver con "St. Anger", eso seguro, y dentro de una línea estilística que, por aproximar, podría asemejarse a una especie de híbrido entre la complejidad, técnica y buen hacer de "…And Justice For All" y esos Metallica más heavys de toque más actual de los "Load"/ "Reload". Pero siempre remarcando que se trata de un disco con una personalidad y feeling muy propios, un disco auténtico de principio a fin que ni mucho menos persigue la sombra de su pasado sino que se apoya en ella para dar con diez temas, más o menos inspirados, pero que reflejan con total fidelidad lo que son Metallica en 2008, una vez atravesadas las turbulencias del pasado y ya con una formación totalmente asentada.
Decir que éste ha sido el primer álbum en el que han tomado parte todos y cada uno de los miembros del grupo, incluído el "nuevo" bajista Robert Trujillo, quien también ha participado de manera activa en "Death Magnetic". Otro detalle que tampoco se puede pasar por alto es que es un disco extremadamente orientado al riff, un disco guitarrero a más no poder donde las guitarras de James y Kirk destacan muy por encima de una buena base donde Robert Trujillo ha ganado mucho peso y donde Lars, aunque sin estar mal, ni mucho menos, no termina de convencerme al 100% tanto por lo limitado de sus ritmos (en ocasiones repetitivos) como por el tratamiento que se le ha dado a su batería, que demasiado a menudo pide a gritos una potencia de pegada y una intensidad que no termina de conseguir en todo el disco.
Por lo demás, el hecho de que se trate de un disco tan extenso (unos 70 minutos más o menos de música) tiene la ventaja de que en él vamos a encontrar una variedad estilística inusitada incluso dentro de los temas. Así, dentro de la impronta característica de "Death Magnetic", vamos a toparnos con secciones y referencias que nos van a recordar constantemente a álbumes anteriores, desde "Kill 'Em All" hasta, mal que me pese, "St. Anger", siendo en ocasiones por supuesto más evidentes y en otras más subjetivas, como suele pasar siempre en estos casos. James Hetfield sigue atacando en las letras sus miedos acostumbrados: ansiedad, impotencia, frustración, muerte y poder.
Con este disco vuelve la afinación E (Mí o afinación estándar de guitarra), que es la que se usó en álbumes como "Kill 'Em All", "Ride The Lightning", "Master Of Puppets", "...And Justice For All"l y "Black Album", ya que en "Load" y "ReLoad" cambiaron a Eb (Mi Bemol) y en el último disco "St. Anger" a C (Do), una afinación más oscura similar a la utilizada por Tony Iommi, guitarrista de Black Sabbath. Robert Trujillo ya indicó que las dos canciones estrenadas en el tour "Sick Of The Studio 2006", "The New Song" (también llamada "Death Is Not the End") y "The Other New Song" (también llamada "Vulturous"), no formarían parte del nuevo álbum en su plenitud y que sólo porciones de estas podían quedar insertadas como partes de otras canciones, y así ha sido.
Por último, decir que Kirk Hammet ha retomado los solos con bastantes ganas, y aunque algunos son obviamente más inspirados que otros, decir que en general van sobradísimos de técnica, y no será raro toparnos con temas de dos (muy normal), tres, y hasta cuatro solos, en lo que a mi me ha parecido también un disco bastante técnico, como en su día lo fuera "…And Justice For All", por seguir con la comparación. También comentar que la voz de James es simplemente la esperada, la de siempre, con poco cambio, aunque sí que es cierto que en este nuevo disco parece como si se hubiera cansado de cantar, a juzgar por la ingente cantidad de partes instrumentales con las que cuenta el nuevo disco.
Lo que ha generado también bastante polémica entorno al álbum, desde que apareciera el año pasado, ha sido su sonido; del que se ha llegado a decir que se escucha mal porqué está excesivamente saturado dentro de esa tónica imperante de subir el volumen al máximo que encontramos en los cds editados hoy en dia por muchos artista. El encargado de masterizarlo tampoco ha ayudado mucho afirmando que cuando le pasaron el disco, una vez mezclado, ya estaba saturado; rehuyendo de esta manera cualquier tipo de responsabilidad. Así pues, y por completar un poco la cosa, allá van unas cuantas pinceladas de lo que nos espera con cada uno de los temas que contiene "Death Magnetic:
1 – That Was Just Your Life: La primera toma de contacto con el disco no podría ser mejor, y te deja ciertamente muy esperanzado y casi con fe renovada en cuanto a lo que nos espera. El corte tiene un inicio prácticamente acústico, pero pronto comienzan esas guitarras tan características de los Metallica más heavys que no desaparecerán prácticamente en todo el disco. De hecho es lo primero que llama la atención, la contundencia de las guitarras y lo acertado esos riffs que a menudo tornan en cabalgueos dentro de unas estrofas en plan ‘allegro’, acompañadas de una batería pasable, que vienen a desembocar en un estribillo muy al gusto de los de la Bay Area, poco definido y desde luego nada comercial. La parte de los solos me ha parecido una pasada, siendo el primero muy clásico, acelerado y técnico, seguido de otro más pausado y dirigido a la vena más melódica de Hammet. En definitiva, un tema de 7:10 que no se hace largo en ningún momento, prueba de lo que antes comentaba.
2 – The End Of The Line: Esta tema era la primera "The New Song" que salió el año pasado aún sin letra ("The Other New Song" parece que no ha llegado al tracklist final). Su comienzo recuerda a los Metallica del "Load"/ "Reload", heavy pero más en la vena actual del grupo, para luego cambiar a un tempo bastante más ligerito (estos cambios se suceden sin parar a lo largo y ancho de todo el disco). Un corte en general más actual, con una parte anterior al solo genial y un parón al final que cambia el signo de la canción por completo, donde se queda un leve punteo de guitarra y una voz muy suave de James, para terminar ya cambiando de nuevo al riff principal.
3 – Broken, Beat & Scarred: "Broken, Beat & Scarred" tiene también ese inicio heavy cañero donde esta vez el bajo tiene un protagonismo extra, seguido de un riff principal de estos tarareables que al menos a mí siempre me gusta encontrar de vez en cuando y todo bajo el ritmo machacón impuesto por un Lars Ulrich que sigue sin despuntar, cumpliendo discretamente, sin más. El final mejora bastante el tema, con otro cambio de tempo y un gran solo, en lo que me parece un buen final, más inspirado que el resto del tema. Es en este punto por cierto donde se hace bastante patente el hecho que comentaba antes, que se trata de un disco con una personalidad y características muy propias, que no pretende copiar nada, lo que yo personalmente agradezco mucho.
4 – The Day That Never Comes: Se trata del primer single del disco, y lejos de ser el típico single, (facilón, comercial, que entre a la primera y generalmente aunque guste más o menos, con poquita "chicha") se trata para mi gusto de uno de los mejores cortes del disco si no el mejor, por lo que se ve que ellos mismos son conscientes de ello al elegir este y no otro como single de adelanto del disco. Por ello no me extenderé demasiado en este en concreto, pero sí remarcar la parte inicial casi hipnótica con esa melodía que para mi gusto está firmada por los mejores METALLICA, aunque el tema me recuerde bastante al "The Unforgiven II" en parte. Genial también esa transición de tono de balada a tesituras más heavys y desgarradas pero sin perder el feeling, algo que siempre se les ha dado muy bien y que no es nada fácil. Destacar que los solos de Hammett podrían ser mejores, aunque ese regustillo a "…And Justice For All" en la parte en que se acaba la balada y llega la parte más cañera que tanto recuerda a "One" es impagable.
5 – All Nightmare Long: Este es el tema que junto con el single más me ha gustado del disco. El inicio ya de por si es bueno, pero el cambio que viene después te arranca la sonrisa lo quieras o no. Buenísimo. Parte thrasher que te mete en el túnel del tiempo hasta los mejores Metallica (aunque si el tempo fuese un pelín más rápido aún y más contundente sería ya la repera). Otro tema lleno de cambios, muy variado, pero que te mete en su transcurso desde el segundo 1 hasta el final, aunque baje un pelín en la parte que le sigue, más machacona, pero que recupera la mejor parte después como si nada. La parte anterior al segundo solo está especialmente falta de esa caña extra de batería de la que hablaba, aunque eso no ensombrece un gran tema que gustará especialmente a los más fans de los primeros discos, pues personalmente me suena como si hoy en día Metallica se pusiesen a grabar un "Kill Em’ All", por ejemplo, con ese sentimiento añejo pero ajustado a lo que es el grupo hoy en día.
6 – Cyanide: De "Cyanide" también habíamos podido ya dar buena cuenta en el video que la banda filmó y colgó perteneciente al Ozzfest de este año, y tengo que decir que es el tema que a mí menos me ha gustado del disco, pero además con mucha diferencia. Recuerda a "St. Anger" por lo repetitivo y poco imaginativo de la letra, que en ocasiones parece metida con calzador, por no hablar de la música, que está muchos niveles por debajo del resto, pues mientras el resto del disco en general se puede decir que tiene bastante miga, aquí parece como si se les hubiera terminado de repente. Tema con un evidente regusto a los Metallica más "modernetes", bastante "lentorro" y machacón, que repite una estructura muy simple varias veces y poco más. Un tema muy ramplón, sin más.
7 – The Unforgiven III: Este es, imagino, el tema más esperado por todo fan de Metallica que aprecie y haya seguido la discografía del grupo, puesto que ya de por sí una tercera parte del conocido tema sorprende. Lo malo es que con la primera, la original, el listón estaba altísimo, y después de escuchar esta tercera, es inevitable que se quede una impresión como de que en los dos últimos temas, ya en la segunda parte del disco, el nivel baja un poco, aunque creedme si os digo que esta afirmación no está sujeta a comparación alguna con la primera versión de "The Unforgiven". El inicio te deja boquiabierto; comenzando con una sola línea de piano preciosa, a la que poco después se suman algunos cellos, creando una atmósfera que promete muchísimo.
Luego entra poco a poco la guitarra con un suave punteo y después las bases, y justo después, cuando la cosa ya sube definitivamente de tono y rompe la atmósfera, no puedo evitar torcer el gesto y despertar de la ilusión que el magnífico inicio había creado. Finalmente acaba siendo un tema que no me ha convencido demasiado, uno más, por debajo de muchos del disco, que quizás por las expectativas que te crea el nombre te deja algo frío, aunque tengo que decir que me ha dado la impresión que es uno de esos temas que ganan con las escuchas (en general el disco entero me lo parece). El tema huelga decir que no se parece en nada a ninguna de las otras dos versiones, y va tocando a su fin con un solo sobrado de técnica pero falto de feeling por completo.
8 – The Judas Kiss: Ahora la cosa mejora un poco, aunque finalmente el tema acaba haciéndose largo a diferencia de otros anteriores ya citados. Un tema muy en la tónica general del disco pero más acertada en su composición que el resto, a la que le sobran un par de minutos, al menos para mi gusto. Riff contundente, tema heavy de Metallica puro y duro, y esta vez guitarras algo más chillonas, diferentes de alguna manera a las del resto del compacto. Lo mejor es sin duda la parte del solo, un solo tremendo seguido de una muy buena parte instrumental.
9 – Suicide & Redemption: Este tema dará que hablar y mucho. Más de diez minutos de tema instrumental que comienza tirando mucho de bajo, y que como parece lógico goza de un elenco de guitarras para todos los gustos, desde las más contundentes e incisivas del inicio hasta otras más melódicas después, todo sin perder el sabor a Metallica, pero cayendo en la monotonía al menos a mi parecer, aunque aquí, al igual que en "The Unforgiven III", me da la sensación de que estamos ante otro de esos temas a los que tendremos que sacarle bien todo su jugo con el paso de las escuchas. Tampoco falta una parte especialmente tranquila y emotiva al final del tema donde James vuelve a sacar a relucir su faceta más "tierna", para acabar el corte como de costumbre, con el riff principal.
10 – My Apocalypse: "Death Magnetic" toca definitivamente a su fin con "My Apocalypse", un tema que eleva y mucho el nivel general al menos de esta segunda parte del disco con un riff inicial asesino (de lo mejor del disco) que juega con una batería que aunque sea ahora al final, me convence, no así tanto la voz, algo floja, todo hay que decirlo. Un tema cortito, de unos 5 minutos (la más corta del disco) y también de las más directas. En la parte final destacan las guitarras de Hammett, buenísimas y, sin perder ese corazón thrasher que creía olvidado, un estribillo en dos partes también muy chulo que te mete de cabeza en un gran corte como este.
Es el primer álbum de estudio de la banda con el bajista Robert Trujillo, y el primero también en ser producido por Rick Rubin, el productor más cotizado y cool del panorama del rock, que después de todo si de trash se trata él produjo el clásico "Reign in Blood" de Slayer por allá 1986; no obstante la situación ha cambiado y es evidente que no se trata de Flemming Rasmussen encerrado en un pequeño estudio de Copenhagen con cuatro músicos ventiañeros que quería comerse al mundo y parieron algunas de las obras por las que siempre serán recordados.
Un regreso que cuanto menos dará mucho juego y dividirá la opinión general, como siempre pasa, no como en "St. Anger", que la verdad fue bastante unánime. Resumiendo, personalmente creo que este nuevo trabajo es el más elaborado, complejo, variado y completo desde "…And Justice For All". Con temas mejores y peores, pero que demuestra el fuerte carácter que esta gente tuvo desde joven y mezcla, como solo ellos podrían hacerlo, lo mejor y lo peor de su carrera en diez temas para todos los gustos que farán y mucho que hablar en los próximos meses. En lo que a mí respecta, quedo satisfecho de ver que Metallica tienen cuerda para rato, algo que me agrada, aunque claro está que al final cada uno opinará en base a sus expectativas.
