“Tú nunca olvidas un plato una vez probado, así que tienes que ser tú”
Yojró Takita dirige 'El cocinero de los últimos deseos' con guion adaptado de la novela de Kejicki Tanaka, por Tamio Hayashi.
Mitsuru Sasaki (Kazunari Ninomiya) es un prestigioso chef de renombre mundial, que nunca olvida un plato que ha probado, siendo capaz de reproducirlo de forma exacta. Tras arruinarse y quebrar su restaurante, debido a su obsesión por la perfección, se dedica a reproducir una última comida, a quien esté dispuesto a pagar un millón de Yens por ella y así, poder ir pagando la deuda. Su obsesión y ego lo llevan hasta el punto, de no asistir al funeral de su padre adoptivo.
Un día recibe la propuesta del más famoso chef chino, Qingming Yang (Yoshi Oida), quien desea ofrecer un banquete y para ello, Sasaki debe reproducir los 112 platos que componían el Gran Banquete Japonés Imperial, creado por el chef Naotaro Yamagata (Hidetoshi Nishijima) en los años 30 en honor al Emperador, en su visita a Manchuria. Sasaki recibirá la cifra de 50 millones de Yens si logra dar con el paradero de las recetas y reproducirla para el festejo. En su investigación, se encontrará con sorpresas inesperadas.
El nuevo filme de Yojró Takita está dividido en dos partes claramente diferenciadas. Por un lado, el presente del personaje principal, el cocinero egocéntrico y obsesivo Mitsuru Sasaki y el mundo que le rodea; y por otro, el pasado que iremos viendo a través de los Flashbacks que nos trasladan a la Manchuria del año 1933, bajo la ocupación de los japoneses. Ambas historias tendrán un eje principal, la gastronomía.
'El cocinero de los últimos deseos' está a caballo entre la comedia y el drama. Se perfila como un filme romántico hacia uno de los grandes placeres y necesidades del ser humano: La comida. En torno al mundo de la gastronomía se han movido muchos negocios a través de los tiempos, pues siempre se ha dicho, que para cerrar una buena transacción, nada mejor que reunirse alrededor de una mesa. Han surgiendo grandes celebraciones como: bodas, bautizos, comuniones y reconocidas comidas relacionadas con la política y la sociedad.
Takita despliega toda su sensibilidad y astucia en este excelente thriller que, si bien comienza como una historia sencilla, a medida que transcurre la trama, te va atrapando, como la mejor de las novelas de suspense y envolviéndote entre los aromas que desprende, la elaboración de un plato. La gastronomía, o deberíamos decir en este caso, la búsqueda de ese gran menú, tema principal de la obra, va dejando paso a otra historia más suculenta, una historia que encierra secretos, traiciones y que cuenta la vida, no solo del protagonista principal y el amor que profesaba a su esposa, sino de una etapa de la historia mundial.
Cada elaboración en las cocinas, cada aroma que casi se alcanza a oler, cada mimo en los productos seleccionados, cada cucharada llevada a la boca percibiendo los sabores que se funden entre el paladar y la lengua, cada gesto en el gran chef y sus ayudantes, está retratado por la espectacular fotografía en la atenta mirada de Yoshinori Oshima. Una fotografía con una iluminación casi idílica y unos encuadres precisos, que embellecerían los más prestigiosos libros de recetas. Una fotografía que traspasa las cocinas y se sumerge en el suspense de esta narración, más allá de las mismas.
Si bien los platos del gran banquete, son la clave la historia, sin sus creadores, sería imposible. La dirección actoral resulta tan sutil y refinada, que apenas nos damos cuenta que estamos ante actores interpretando una obra. Todo está medido para que el espectador disfrute de aquello que no puede degustar, pero sí percibir con la mente, el oído y la vista, sin que nada le altere, salvo aquello que Takita, le tiene preparado. Cada interpretación nos deja con un gran sabor de boca, destacando su plato principal, que sin ninguna duda son: Kazunari Ninomiya que además de un magnífico actor, es cantante y compositor Seiyu; y Hidetoshi Nishijima, como Yamagata. No me olvidaré de Aoi Miyazaki como la entregada, delicada y amorosa esposa de Yamagata. Un filme donde cada actor logra que cada personaje se supere así mismo, encuentre su propia identidad, libertad y sea fiel a sus propósitos, aunque no siempre esté de acuerdo. Cada uno de ellos forma parte de los ingredientes de este gran festín.
El director de cine japonés Yojró Takita comenzó su andadura en el séptimo arte a través de Mukai Productions, donde trabajó como asistente de dirección. Cuenta con más de cuarenta películas en su filmografía. En los años 80 rodo algunas pinku eiga de la serie Chikan Densha, la primera de ellas fue “Chikan Onna Kyôshi” a la que siguieron “Chikan Densha: Man´in mamesagashi” o “Chikan Densha: Motto Tsuzukete” entre otras. En 1999 dirigiría, “Secret” que aunque se alzaría con los premios de mejor actriz (Ryoko Hirosue) y mejor guion para Horoshi Saitô, en el Festival de Cine Fantástico de Sitges, no se estrenaría en España, teniendo que esperar a “La espada del samurái” 2003 y “Despedidas” 2008, filme que obtuvo los premios a la mejor película en el Festival de Berlín y el Óscar a mejor película extranjera; la tercera obra es la comentada en esta entrada.
- Mi nota es: 9 / 10
- ESTRENO en ESPAÑA: 23 de Agosto
- REPARTO: Kazunari Ninomiya, Hidetoshi Nishijima, Aoi Miyazaki, Gou Ayano, Yoshi Oida, Togo Igawa, Daigo Nishihata y Yutaka Takenouchi.
- PRODUCTORA: Pipeline
- DISTRIBUIDORA en ESPAÑA: Sherlock Films.