Spartacus: Gods of the Arena (Photo credit: Wikipedia)
Estreno esta noche en Cuatro de la pre-cuela sobre la Casa Batiato, antes de la llegada de Espartaco. Un joven Batiato toma el puesto de su padre al mando de la escuela de gladiadores, lo que le lleva a utilizar a uno de sus más hábiles gladiadores para ganarse el favor de un hombre de posición elevada. Cuando conocimos a Espartaco, cada uno de los demás personajes estaba ya en el sitio que le correspondía, pero...
¿Cómo llegaron hasta ahí? Esta precuela nos permitirá conocer en profundidad a grandes secundarios como Lucrecia (Lucy Lawless, "Xena, La princesa guerrera") y Batiato (John Hannah, "La momia", "Cuatro bodas y un funeral"), que aquí se convierten en protagonistas; y enterarnos de cómo algunos personajes llegaron a ser como son. Es una historia interesante y redonda, en la que todo encaja con lo que ya sabemos por la serie original, pero que mantiene perfectamente el tono y el ritmo original (y sí, también la 'tríada Spartacus': sangre, sexo y torsos).
Cuando comienza "Spartacus: Dioses de la arena", la escuela de gladiadores disfruta del brillo de su campeón Ganicus, cuya habilidad con la espada sólo encuentra rival en su sed de vino y mujeres. Éste es el momento que el joven Batiato ha estado esperando. Preparado para derrocar a su padre y tomar el control, traicionará a quien haga falta para asegurarse de que sus gladiadores son los más demandados. Tendrá junto a él a su leal y calculadora esposa Lucrecia para cada plan turbio, y recurrirá a su seductora amiga Gaia cuando sea necesario. Juntos, no habrá nada que los detenga a la hora de engañar a las masas, hacerse con el poder y chuparle la sangre a Capua.