Estreno este viernes en cines
EL PROBLEMA ESTÁ EN LA SANGRE
La cultura se encadena: inspirada en la novela de Camille DeAngelis
La cultura se encadena en “Bones and All”, inspirada en la novela de Camille DeAngelis. Toca escribir sobre la película que cerró el festival de Sitges, de estreno en cines este viernes 25 de noviembre de 2022.
A priori, un cóctel ganador. En la dirección, Luca Guadagnino (“Call me by your name” o el remake de “Suspiria”). Y como actor principal Timothée Chalamet, protagonista de la anteriormente citada “Call me by your name” y recientemente visto en su papel como Atreides en “Dune” Además, será el futuro Willy Wonka.
“Bones and All” es una historia de amor entre dos jóvenes caníbales, y su recorrido en coche en búsqueda de la madre de ella. Maren, a la que da vida Taylor Russell. Tenemos problemas existenciales, alguna escena de “comidas” y un tercer caníbal, al que da vida Mark Rylance, que no se sabe muy bien qué pinta en todo esto...
Crítica de la película HASTA LOS HUESOS: BONES AND ALL - CEC CINE
“Bones and All” funciona perfectamente si nos quedamos en los problemas existenciales de los protagonistas. En cómo no pueden renunciar a lo que son, a pesar de que lo intenten. A los traumas familiares que los dos han sufrido, y como esos traumas hacen que la unión entre ellos sea mucho más fuerte.
Sus conversaciones son lo mejor de la película, junto a las canciones que suenan mientras conducen y recuerdan cosas que no quieren recordar. Hay quien dirá que todo es demasiado pausado, lento... Pero, en este caso, la lentitud ayuda a entender mejor a los personajes.
El problema viene con la sangre... Me explico: entiendo que en la novela de Camille DeAngelis las escenas sangrientas tengan un sentido. Pero aquí juegan en su contra. No puedes hacer una película que, en algunos momentos románticos entre ellos dos, parezca un anuncio de Calvin Klein, y luego meter -por ejemplo- la escena de la feria. Más que la feria, el desenlace en el campo…
No puedes dejar al espectador con la sensación de que van a intentar ser normales, aún sabiendo que eso no durará para siempre, y meter un tramo final tan visual. Un fuera de plano habría funcionado mejor. Porque al final no acabas de convencerte de si estás ante una road movie existencialista. La sangre juega en su contra, totalmente.