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ESPIGA DE PLATA: MEJOR PELÍCULA Y PREMIO DEL PÚBLICO EN LA SEMINCI
"Una comedia con mucha reflexión: GRACIAS Neus Ballús por retratar el día a día y por descubrirnos un trío protagonista con una química sin igual"
REVIEW + TRAILERS
La película elegida por el “Rec Festival Internacional de Cinema de Tarragona” para inaugurar su vigésima primera edición ha sido “Sis dies corrents (6 días corrientes)”. La nueva película de Neus Ballús i Montserrat arranca muchas carcajadas en el público, pero también le hace sentir cierta incomodidad, cuando le hace ser testigo de la discriminación racial latente. Haciéndolo además, de una manera innovadora. Aquí esa discriminación, por ejemplo, también muestra que a veces es recíproca. Y eso se ve en pinceladas, como muestran esos compañeros de piso de Moha. Un electricista que entra a trabajar en la empresa donde prestan también servicios Valero y Pep.
Lo que asoma como comedia, que es tener a tres personajes tan distintos trabajando en la misma empresa y mostrándonos lo surrealista que puede ser su trabajo, muestra esas pinceladas anteriormente comentadas. Pinceladas que consiguen quedarse dentro del espectador, mucho más que las risas, muy merecidas que producen las situaciones que viven este trío con sus clientes. Cada día es un día de trabajo, un cliente distinto y una situación diferente. Cada uno de esos días de trabajo, funcionan como un tiro en lo cómico. Escenas dignas de las mejores comedias que uno puede disfrutar en cualquier serie cómica de nivel, mucho nivel. A eso, ayudan y mucho la magia que desprenden los tres protagonistas.
En relación a los protagonistas, hay algo que como espectador te deja con la boca abierta. Y es que Moha en la vida real es Mohamed Melalli. Valero en la vida real es Valero Escolar y Pep Sarrà, como no podía ser menos, en la vida real… Lo cual es una apuesta muy arriesgada de Neus Ballús i Montserrat. Ceder el peso interpretativo a actores no profesionales, demuestra personalidad y valentía. Hay que aplaudir esa valentía. Como hay que aplaudir lo bien que se entrecruzan las discriminaciones raciales, con las carcajadas. El paso de los años, con las carcajadas. Algo tan sencillo como un traje, resulta un drama que si tienes cierta edad, consigues empatizar y mucho. Quizás no con el instrumento elegido, el traje, pero si con la sensación de que ya no somos lo que fuimos.
Gracias Neus Ballús i Montserrat, por una comedia con mucho por reflexionar. Por retratar el día a día y por descubrirnos un trío protagonista con una química que difícilmente se puede encontrar en una película.