Uno de los platos fuertes del ESPECIAL FESTIVAL DE SITGES 2019 EN CEC
“The Lodge”, quédense con este título. Y quédense también con el nombre de su protagonista, Riley Keough. Muchos la descubrimos en la primera temporada de “The girlfriend experience” e intuimos que estábamos delante de una actriz con mucho talento. Y resulta que ahora viene esta película, ¿se han quedado con su nombre? y confirma nuestras teorías.
Porque está soberbia como Grace. La nueva novia de Richard, el motivo por el cual la todavía mujer de Richard se suicida, dejando a dos pequeños sin madre. La película bebe de clásicos como “El Resplandor” (aquí no hay hotel, aquí hay casa en los confines del mundo e incomunicada). Y apuesta por esa maravillosa teoría de “menos es más”. No hay monstruos, hay oscuridad, hay ruidos, hay imágenes que descolocan totalmente al espectador. Nunca una casa de muñecas había causado tan mal rollo. Nunca unos niños habían sido tan “cabrones” y quizás por ello, cuando acaba la película piensas, joder, pero también joder si es que…
Me tengo que morder la lengua, pero estamos ante un guión brillante, que juega con el espectador como le da la puñetera gana. Que consigue que se piense el más listo para acabar dejándolo como el más tonto. Y que consigue que una vez le has tomado el pelo siga manteniendo su interés y al mismo tiempo piense “engáñame más”.
Vuelvo a Riley Keough, cada vez que vuelva a oír cantar me mearé encima del miedo, porque madre mía…. Es capaz de transmitir tanto con una mirada pérdida, como si no fuera la cosa con ella, como si realmente en su vida real arrastrara unos traumas que déjate tu estar, de eso de cuando tienes quince años “mi novio/a me ha dejado, no lo superaré…”
“The Lodge”, obra maestra, uno de los platos fuertes del festival de Sitges. Seré sincero con ustedes, nunca he visto unos últimos minutos de proyección envuelto en un silencio del público tan brutal. Gane o no el festival, estamos ante una de las películas del año.