Bottom of Wall Street from FDR (Photo credit: SheepGuardingLlama)
Seguimos con las recomendaciones de documentales que han intentado reflejar los usos y abusos del poder que han desembocado en la crisis económica actual que estamos padeciendo.
En esta ocasión, nos encontramos ante una recreación de lo que muchos desearíamos: que se sentara en el banquillo de los acusados a todos aquellos que, por codicia, han provocado que ahora todo el planeta esté sufriendo las consecuencias...
En este falso documental, veremos como se organiza un juicio en el que los abogados, afectados, testigos y jurado popular son reales. Por supuesto, el juicio no tiene repercusiones reales, pero estamos ante un ejercicio lúcido, bien hecho, y al que todos le tenemos ganas.
Mientras en el mundo real no podemos disfrutar de un juicio a los culpables de la crisis, el cine documental, y también el de ficción, llevan unos cuantos intentos, más o menos reivindicativos, de enjuiciar y castigar a quienes deberían ser juzgados, y por supuesto, encarcelados. Todos ellos van siendo publicados en esta sección de cine documental de cultura en cadena.
En este caso, queremos haceros la recomendación de ver este film francés, Cleveland versus Wall Street, que documenta cómo el 11 de enero de 2008, el abogado Josh Cohen y sus asociados, representando a la ciudad de Cleveland, deciden llevar ante la justicia a los 21 bancos responsables de los embargos inmobiliarios que pusieron patas arriba la ciudad.
Sin embargo, esos bancos de Wall Street se oponen por todos los medios posibles a la apertura del caso. Cleveland Versus Wall Street es una película sobre este proceso que debió tener lugar, en la que todos los personajes, el juez, los abogados, los testigos, incluso los miembros del jurado que deben dar su veredicto desempeñan el mismo papel en la vida real. Paso a paso, testimonio a testimonio, la película desmonta con un lenguaje claro el mecanismo de las "subprime", esos préstamos hipotecarios de alto riesgo que han incendiado la economía mundial, para convertirse en una fábula universal sobre el capitalismo.
