tu vida como quieres,
al menos intenta
no degradarla
en el demasiado contacto con el mundo,
con la demasiada actividad
y las demasiadas palabras.
No la degrades llevándola de un sitio a otro,
sometiéndola a la cotidiana estupidez
de las fiestas y las relaciones sociales,
hasta que llegue a convertirse en una carga.