Una crónica de Enrique Menéndez para Culturaencadena.com
Fotos: Jordi Deza.
Todo tiene un fin, y Kase.O ha cerrado la gira de “El Círculo”. Dos años de conciertos que se despedía del gran público en un Palau Sant Jordi de Barcelona que hacía justicia al hecho de que, hace un año, su anterior visita tuviera que ser en un Sant Jordi Club que se quedó muy corto.
En esta ocasión, no se iba a repetir el error. Porque un concierto de tal magnitud requiere de un escenario que esté a la altura de las circunstancias.
Una de las señales de que la cosa iba en serio era que, a pesar de que el plato fuerte no empezaba hasta las 22:00, 4 horas antes ya había cola. Esa cola para los que como cantan Love of Lesbian “primeras filas vuestra obsesión”. Esa cola compuesta mayoritariamente por un público joven, pero donde los veteranos también se hacían notar. Es curioso ver la perfecta mezcla de una parte del público que podría ser el padre de la otra parte. Joder, que buena señal es ver como el rap no entiende de generaciones!!!!
Os hablaba de plato fuerte, pues hablemos del aperitivo. Hablemos de Xtragos que tenía la difícil papeleta de calentar, un poco más, un público que a las 21:00 ya llenaba media pista. Seguramente porque la gente comete el grandísimo error de no entender que un telonero simplemente es un nombre más pequeño en un cartel. Y seguramente Xtragos no tardará en ser el nombre grande. Pero esta noche no, esta noche salió a defender los temas de su trabajo “Corazonada”. Acompañado de Flexi Flex, abre con Sístole y durante media hora uno disfruta viendo como Xtragos disfruta como un niño de la ocasión. Tiene claro cuál es su papel y lo disfruta. Hace que las manos de todo el público se muevan con “Aventuras Nuevas” y como dice la expresión “se la saca” con la combinación “Feelmaker” y “Masaje Mental”. Finaliza su actuación dando las gracias por la oportunidad de rapear frente un Sant Jordi y con un “Diástole” que acaba de dejar al público todo lo caliente que hace falta, para el plato fuerte.
Con una puntualidad inglesa, R de Rumba se pone a los platos y empiezan a sonar los primeros acordes de “Intro”, difícil no emocionarse, te guste o no el rap, saber lo que se viene es grande, muy grande. Y es así como Kase.O sale al escenario para “vernos celebrando”. Deja claro que esta noche vamos a entrenar, cuerpo, mente y alma y pone a botar a todo Dios con “Esto no para”. A su lado, durante todo el concierto El Momo, rapero ya curtido en mil batallas, con trabajos a sus espaldas y que ojalá esta gira le haya acabado de dar a conocer a todos los que desconocían su potencial. Es evidente la química de los dos en el escenario, coreografías, sonrisas y cada uno cumpliendo su papel con toda la profesionalidad/felicidad que la ocasión requiere.
Kase.O nos deja claro que esta noche los temas de “El Círculo” y los viejos clásicos de “Violadores del Verso” van a sonar. Los temas caen y entre ellos asistimos a un curioso medley por el que circulan entre otros “Vivir para contarlo”, “Ocho Líneas”. Y llega el momento protesta, el momento en que Kase.O hace corear a todo un Sant Jordi el lema “Fuego para la puta Manada”. Nos habla de que la violencia de género es una lacra, que el machismo no tiene lugar, aunque llevamos siglos creciendo con ello. Nos pide que respetemos a las mujeres y nos hace permanecer un minuto en silencio en memoria de Laura Luelmo. Silencio que desgraciadamente, tiene que romper alguien del púbico que no entiende que para alabar a tu héroe hay mejores momentos. Eso sí, brutal la respuesta del resto de los asistentes, mandándole callar. Por cierto, que Kase.O es una persona consciente de lo que ocurre en la sociedad, queda claro, si se puede un poco más, latente con su recuerdo para la perra Sota.
Momo tiene un momento para lucirse con sus solos y después Kase.O nos pone en situación antes de enlazar el romanticismo de “Mazas y Catapultas” con la sensualidad de “Mitad y Mitad”. En medio una crítica sincera a lo falsas que suenan las canciones de amor que llenan las radios. Vuelve el Kase.O para recordarnos que solemos ignorar las desgracias que azotan a otros humanos simplemente por el color de su piel.
Y llega el momento colaboraciones. Y aparece Xhelazz para cocinarse “Billete de ida hacia la tristeza” y aparece Sho-Hai para unirse a la fiesta con “Viejos Ciegos”. Fin de colaboraciones y un “Repartiendo Arte” hace pensar que ese himno que es “Basureta” esté cercano. Y eso sucede cuando Kase.O desaparece del escenario, alguien coloca una silla y todo el Sant Jordi se queda callado, mientras por enésima vez Kase.O se desnuda emocionalmente en el escenario.
No tardará mucho en finalizar el concierto. No tardará mucho en que Kase.O, El Momo y R de Rumba se despidan de un público que con los años recordará que estuvo en ese círculo donde Javier Ibarra como bien rapea “hizo lo que le salía de los huevos”. Y que así sea durante muchos años.
Hipocrita por tu parte llamar-lo puntualidad inglesa, hace pensar que estabas distraido. Hehe.
Deberian poner en las escuelas el discurso feminista, enserio, porfa.
Saludos