Por nuestra propia naturaleza humana, ya mostramos síntomas claros de andar perdidos y vagar errantes durante el transcurso de la vida, moviéndonos a través de ella según traumas, constantes y experiencias. Cuando la cosa se desmadra, perdemos el rumbo más de lo normal y desvariamos considerablemente; esto implica que actuemos en consecuencia, y es entonces cuando los resultados de andar perdidos más de lo habitual se revelan como desastrosos, y sólo cabe esperar que dicha fase dure lo menos posible. Mantener la dirección menos alejada de nosotros mismos es un acto difícil de conseguir y no hacerlo nos puede costar muy caro. Esto es aplicable en todos los campos de la vida y cómo no, también en los grupos, músicos y artistas que, como buenos humanos que son, les suele ocurrir con bastante frecuencia.
Black Sabbath anduvieron bastantes años sin rumbo ni dirección...
Justo desde el momento en que el cantante de Deep Purple, Ian Gillan, entró en la banda, iniciándose con él una época un tanto oscura e inestable en el seno de la banda, con resultados a veces más que "curiosos". A principios de los 80, Black Sabbath había tenido la suerte de encontrar a alguien como Ronnie James Dio para reemplazar al vocalista original Ozzy Osbourne. Los problemas en la formación anterior eran evidentes a partir de 1976, y los Sabbath iban perdiendo frescura a la vez que Tony Iommi (guitarrista) iba tomando el control de la banda haciendo discos cada vez más pretenciosos con largas horas de trabajo en el estudio que hacían perder la paciencia a cualquiera de los músicos, aunque sobretodo a Ozzy, que no se sentía nada a gusto con la dirección que iba tomando la banda.
Los abusos con todo tipo de excesos tambien habían agotado bastante a la banda lo que hizo que Ozzy incluso les dejara durante unos meses, aunque finalmente Ozzy volvió porque no tenía ningún proyecto claro, y como Sabbath no acababa de funcionar del todo con su momentáneo sustituto Dave Walker, intentaron solucionar diferencias, aunque en realidad fue ahí donde quemaron su último cartucho. Tras la huida de Ozzy para iniciar su carrera en solitario, Sabbath encontró a un fantástico y diminuto cantante llamado Ronnie James Dio, que acababa de dejar también a Rainbow, y encajó perfectamente en la banda. Con él renovaron y adaptaron su sonido al heavy metal, que ya empezaba a emerger con fuerza en 1980, y grabaron un par de discos muy buenos: el clásico "Heaven and hell" y "The mob rules".
Todo iba viento en popa, pero en el momento de editar el directo "Live evil" (título con palíndromos) ya se habían creado dos fracciones dentro la banda completamente irreconciliables. De esta manera, Ronnie y el batería Vinnie Appice abandonaron, y los fundadores Tony Iommi y Geezer Butler tuvieron que volver a buscar a cantantes conocidos en paro.
Ian Gillan (Deep Purple), que llevaba ya unos años funcionando en solitario, había decidido hacer un parón justo en este momento, e intentar que ahora que Rainbow también se separaban, reformar a Deep Purple con su formación clásica Mark II (dicha formación en estos momentos estaba repartida en dos bandas: Whitesnake y Rainbow y la separación de estos últimos dejaba a Richie Blackmore y Roger Glover libres). Pero como todavía no era el momento, Gillan aceptó la oferta de Black Sabbath y acabó entrando en la banda, con los que hizo una gira y grabó un tropiezo estelar: Born again.
Para el disco habían conseguido reclutar al batería original, Bill Ward, lo que era un buen indicador de lo que acabó no siendo. A muchos nunca les acabó de cuadrar Gillan en Sabbath y pronto se llamó a la formación, medio en broma, Purple Sabbath, aunque esperaron a que se editase el disco y se llevara a cabo la gira para sacar sus propias conclusiones. Cuando se editó "Born again" el mismo Gillan no ayudó mucho afirmando que el disco le hizo vomitar dos veces, una cuando vió la horrible portada y otra cuando escuchó la producción del mismo. La voz de Gillan, demasiado chillona, resultaba extraña en el entorno Sabbath y las canciones tampoco eran nada del otro mundo, y visto el panorama, ahora sólo quedaba salir de gira y acabar de demostrar que dicha unión había sido de todo excepto fructífera.
El primer contratiempo fue que el batería Ward no iba a salir de gira, pues su estado de salud todavía le estaba pasando factura por los excesos cometidos durante la década anterior, y contrataron al batería de la E.L.O. Bev Bevan como sustituto, cosa que todavía encajaba menos (más que nada por lo poco en común que hay entre dos bandas como la Electric Light Orchestra y Black Sabbath). La gira fue bastante "Spinal Tap", empezando por el escenario gigantesco lleno de dolmenes (parodiado en la misma película), el bajo estado de forma vocal que mostró Ian Gillan y el hecho de que llegasen incluso a versionar un tema mítico de Deep Purple como "Smoke on the water", y fueron muchos los que agradecieron que no llegaran a tocar ninguno de la E.L.O.
Al finalizar la gira el mismo Gillan anunció que por problemas vocales dejaba a la banda aunque tardó poquísimo en reunir de nuevo a Deep Purple (su verdadera intención) que llevaban separados 8 años. Sabbath eligió como cantante al desconocido Dave Donato, pero tras una entrevista en la revista Kerrang, fue expulsado de la misma. Ahora empezaban los momentos más confusos de Sabbath ya que si no se hizo nunca oficial su disolución, la banda quedó en estado letárgico. Estamos en 1984 y ya era el momento de que Iommi pensara en publicar un disco en solitario, una idea seguramente llevaba en la cabeza desde hacía tiempo.
Aprovechando el noviazgo con la también guitarrista Lita Ford empezó a ensayar con la banda de ésta y el teclista Geoff Nicholls (miembro en la sombra de Black Sabbath, que había estado ya algunos años grabando y haciendo giras con ellos). Reclutaron como cantante al cristiano reconvertido Jeff Fenholt y grabaron una serie de demos con los temas que estaba preparando el guitarrista para su disco en solitario que se pueden encontrar colgadas por internet con el título de "Star of India". Tras la ruptura sentimental con Lita Ford, lo único bueno que consiguió de ella fue robarle al excelente batería Eric Singer (digno de entrar en nuestra sección FAMOSOS DESCONOCIDOS) para su proyecto.
Lo que vino luego fue tan simple como que una vez grabado el disco la compañía mostró ciertos reparos y acabó siendo editado bajo el nombre de Black Sabbath featuring Tony Iommi, el disco se titulaba "Seventh star" y la banda también había cambiado considerablemente. Jeff Fenholt había sido sustituido por Glenn Hughes (otro ex Deep Purple), el bajista era Dave Spitz puesto que Gordon Copley había preferido permanecer en la banda de Lita Ford y se mantuvieron Singer, Iommi y Nicholls. La gira la hicieron como Black Sabbath aunque tuvieron que sustituir al principio de la gira a Glenn Hughes por el desconocido Ray Gillen. Hughes, un gran bajista y un cantante superdotado para muchos, en esta época atravesaba su fase más decadente por el abuso interminable de drogas que padecía desde hacía muchísimos años. Lo más curioso o milagroso es que una vez limpio, el hombre demuestra no haber perdido para nada sus facultades vocales y es impresionante el chorro de voz que mantiene y el estado de forma en el que se encuentra actualmente.
A pesar del resultado satisfactorio de la gira, gracias sobretodo por la forma en que Ray Gillen les había salvado el culo en plena deserción de Hughes, Gillen tambien fue expulsado durante las sesiones de grabación del siguiente álbum "Eternal idol". Se borraron sus pistas de voz y fueron regrabadas por Tony Martin, el cantante más 'estable' de Sabbath hasta 1995, exceptuando una risotada en la canción "Nightmare" que es lo único que mantuvieron de Gillen. A los más curiosos de nuestros lectores, comunicarles que en internet se encuentran estas demos cantadas por Ray Gillen y también algunos conciertos de la gira de Seventh star donde podréis comprobar las grandes cualidades vocales de Ray Gillen que acabó muriendo años después victima de la sida. Luego vendrían otros discos como "The headless cross", "Tyr", "Dehumanizer", "Cross purposes", "Cross purposes live" y "Forbidden".
Señalar que la trayectoria discográfica de Sabbath desde "Born again"(1983) hasta "Forbidden"(1995), no es infumable ni mucho menos, a pesar de lo que pueda parecer, es incluso disfrutable si no piensas mucho en que Black sabbath son los autores de dichos álbumes, pero carecen bastante de personalidad propia. En estos años de confusión sabática dejando a Iommi y Nicholls como miembros estables, llegaron a pasar por la banda, para que os hagais una idea de como iban las cosas, los siguientes músicos:
1- Como cantantes: Ian Gillan, Ron Keel, Dave Donato, Jeff Fenholt, Glenn Hughes, Ray Gillen, Tony Martin y Ronnie James Dio.
2- Como bajistas: Geezer Butler, Gordon Copley, Dave Spitz, Bob Daisley, Jo Burt, Laurence Cottle y Neil Murray.
3- Como baterías: Bill Ward, Bev Bevan, Eric Singer, Terry Chimes, Cozy Powell y Bob Rondinelli.
Black Sabbath on stage at Schleyerhalle in Stuttgart, Germany. "Reunion Tour". From left to right: Geezer Butler, Ozzy Osbourne, Tony Iommi, Bill Ward (Photo credit: Wikipedia)
No sé si me habré dejado a alguien pero ya veis que es mucho baile de músicos para una banda que durante 10 años no había cambiado ni una sola vez de formación. Luego llegó la reunión con Ozzy, que si bien no ha dado ningun fruto discográfico a parte del directo "Reunion" (que también incluía dos temas nuevos grabados en estudio), sí es verdad que durante muchos años ha ido generando dinero y ha hecho realidad el sueño de muchos. Ahora la banda se encuentra actuando bajo el nombre de Heaven and Hell para no crear más confusion y de paso no molestar a Ozzy más de la cuenta, por la cuenta que les trae, válga la redundancia, con la formación que hizo la gira de éste album del mismo título en 1980: Ronnie James Dio (voz), Tony Iommi (guitarra), Geezer Butler (bajo), Vinnie Appice (batería) y Scott Warren de la banda de Dio, como teclista adicional.
