BERLIN, GERMANY - JANUARY 26: German Chancellor Angela Merkel welcomes Spanish Prime Minister Mariano Rajoy upon Rajoy's arrival at the Chancellery on January 26, 2012 in Berlin, Germany. The two leaders were scheduled to discuss the current European debt crisis, among other matters. (Image credit: Getty Images via @daylife)
Entendemos, como dicen ellos mismos e igualmente mucha gente, que sólo llevan cien días desde que han empezado a gobernar, pero este poco tiempo ha sido más que suficiente para comprobar sus intenciones o la idea de gobierno, resumida en la aprobación de una reforma laboral que lleva al ciudadano asalariado, o sea al trabajador, a rayar la miseria y la pobreza...
Y es más, a unas reglas y condiciones de trabajo que sólo pueden ser asumidas asumiendo a su vez la esclavitud y el sometimiento: con estas condiciones sinceramente es mejor vivir como buenamente pueda uno al margen del sistema, pues almenos se ahorrará así asumir el papel de esclavo en su propia carne: hoy ha salido un estudio en el que se observa que, los que trabajan, ya trabajan un 40 por ciento más de lo que lo hacían.
Igualmente, en este poco tiempo que lleva gobernado el PP, han subido impuestos (contradiciendo sus propias palabras, como ya publicamos con videos demostrativos del antes y el después de la toma del poder), y los que están al caer, que no serán pocos, serán unos impuestos que hunden más en la miseria a las ya mermadas economías familiares de los trabajadores.
Asimismo, en este poco tiempo que llevan gobernando, han dejado bien clara su idea de estado, un estado privatizado donde todo acabe en manos de empresas privadas y los legisladores, sin más responsabilidad pública a cargo estatal que mantener bien hinchados sus privilegios y sueldos de la clase de la clase legisladora, o sea, de los politcos.
Es por esto, que de los cien días gobernados ya por el actual gobierno, esos 100 días de confianza que se supone hay que darle por gracia e invento de no sabemos muy bien quién ni por qué, sobran ya 99 para comprobar el devenir de un gobierno, que de momento intenta meter a los ciudadanos, a base de ajustes y de ir apretándolos más y más, en la botella de las condiciones que dictan los poderes económicos esclavizantes y especulativos, en vez de buscar ajustes que recaigan en los que mas tienen, pueden y ganan.
Así las cosas, y sin ganas de ser agoreros, podríamos no salir jamás de la crisis, porque la crisis es sólo el sintoma, no la enfermedad: el enfermo de crisis no saldrá jamas de esta sin solidaridad y esfuerzo por parte de todos, por una parte con un consumo más solidario con los que nos rodean, y no buscando siempre la oferta más barata y el beneficio propio, un mercado del saldo dominado y acaparado por los grandes grupos comerciales o monopolios, e igualmente una mayor solidaridad por parte de los que más tienen o pueden, a arrimar el hombro, pagando impuestos más justos, solidarios y, sobretodo, necesarios.