Internet (Photo credit: Wikipedia)
'Control tecnológico' es el título con el que 'La Noche Temática' se adentra este sábado en la seguridad en Internet, a través de dos documentales: 'Términos y condiciones de uso' pone en cuestión la privacidad en Internet y 'Traficantes de armas digitales' muestra cómo un ordenador o un teléfono móvil pueden convertirse en una trampa mortal.
Cada vez que usamos Internet, nos conectamos a algún servicio o utilizamos una app, aceptamos una larga lista de términos y condiciones de uso. Están diseñados para que se lean con dificultad, para ser invisibles y prácticamente inaccesibles. ¿Sabemos realmente lo que aceptamos? La interceptación digital es un instrumento crucial cuando se trata de localizar a criminales o terroristas. Pero cuando cae en manos de regímenes dictatoriales represivos como Libia o Siria utilizan esta tecnología para rastrear a los insurgentes y a los blogeros.
'Términos y condiciones de uso'
'La Noche Temática' abre con este documental norteamericano que muestra cómo cada vez que hacemos click generamos una nube de datos que registra todos nuestros movimientos en línea y cuestiona la política de privacidad de Internet. Leer las políticas de privacidad –lo que se denomina letra pequeña- que aceptamos cuando visitamos un sitio web o empleamos alguna aplicación es algo que no solemos hacer. Sin embargo, estos acuerdos permiten a las empresas hacer cosas con nuestra información personal que ni siquiera podemos imaginar.
Hay compañías de las que nunca se oye hablar, que dicen tener unos 1.500 datos sobre el ciudadano estadounidense medio: si es diestro o zurdo, qué clase de perro tiene, en qué perfil psicológico encaja…, y todo eso se puede utilizar en las decisiones que las compañías toman.
'Traficantes de armas digitales'
'La Noche Temática' continúa con este documental galo que explica cómo un simple ordenador o un teléfono móvil pueden convertirse en una trampa mortal para quien los utiliza. Equipos de espionaje digital son empleados por la policía contra los cibercriminales.
Por otra parte, los disidentes que viven en una dictadura tienen que aprender a sobrevivir en un nuevo entorno. Se les espía, se les rastrea con GPS y se les monitoriza. Para mantenerse con vida, deben deslizarse a través de las redes digitales. Es una cuestión de vida o muerte.