La cultura se encadena: Basada en los cómics de Garth Ennis
Vistos los 8 capítulos que forman la primera temporada de “The Boys” lo primero que a uno le viene a la cabeza es “joder, ya era hora!!!”. Hora de que se diera un giro a la tan utilizada asociación de palabras “tipo con poderes-superhéroe”. Porque basándose en los cómics de Garth Ennis, aquí los buenos no son tan buenos y los perdedores son una banda de personajes, dejémoslo en singulares, que deciden cambiar las reglas del juego.
¿Qué juego? Pues ese en el que las empresas se hacen con el poder de los supuestos superhéroes, decidiendo que anuncian, que hacen o que dejan de hacer. No haré spoilers porque muchos/as todavía tienen que disfrutar de esta serie (aviso, hay segunda temporada prevista), pero hay un cierto paralelismo entre el concepto superhéroe-estrella deportiva. Firman sus contratos, van donde les llaman, la diferencia es que nadie espera que un Messi/Cristiano Ronaldo muestren una cara amable y luego vayan por ahí siendo unos cabronazos de proporciones épicas.
Y eso es lo que es el personaje de Patriota. El jefe del cotarro por decirlo de alguna manera, el enemigo declarado de Carnicero (al que interpreta Karl Urban). Un Karl Urban que pasará a la historia por su interpretación de un ser movido por la venganza, con métodos poco éticos, pero que despierta la simpatía/adicción del espectador por su carisma. Ojo y aquí viene una de las grandes bazas de la serie, Carnicero cae bien a pesar de su locura y al resto de sus colaboradores (en especial Frenchie y Hughie) también te los llevarías a cenar. Pero es que también lo harías con algunos de los miembros de Los Siete (homenaje a “Los Siete Magníficos”). Siete “superhéroes”, de los cuales uno no puede llegar a sentir cierta compasión, en especial del personaje de Profundo y de Reina Maeve. Seguramente los dos que menos entienden/aceptan como demonios han acabado donde están y el precio que están pagando. ¿Patriota? El alma de la fiesta, el que se come la pantalla en cada aparición. ¿Cabronazo? Totalmente. ¿Necesario? Totalmente y más!!!
Fastidia no poder hacer spoilers, no poder hablar de cierto momento dramático en un vuelo, no poder decirles que el gore se agradece y mucho, no poder decirles que no hay canción que suene que estropee alguna escena, no poder decirles lo mucho que me reí con el motivo principal de la sed de venganza de Hughie. No por lo cómico del asunto, sino por la manera en que se lleva a la pantalla. Fastidian muchas cosas, pero también ayuda pensar que tendremos continuación a uno de los finales más flipantes que he visto de una primera temporada. Un final que es imposible que alguien pueda decir “me lo esperaba”.
En definitiva “The Boys”, otra maravilla de serie que nos regala Amazon Prime Video, un buen reclamo para pasarse por una tienda de cómics o tirar de Amazon (todo queda en familia) y pillar todos los volúmenes de la obra que ha creado Garth Ennis.