YouTube nació para abrir espacios a la libertad creativa y ha terminado evolucionando en un negocio alimentado a golpe de click por una forma de esclavitud digital.
“YouTube es un actor político. Tiene intereses y ejerce su poder”
‘Documentos TV’ estrena el reportaje ‘100 millones de visitas’, en el que analiza en el funcionamiento de YouTube, la plataforma que prometía hacer soñar a sus usuarios.
El protagonista del documental es Itamar Rose, un youtuber israelí que no termina de despegar en la plataforma. Un trabajo que muestra quién maneja los contenidos y cómo esta plataforma, supuestamente gratuita, está controlada por fuerzas de las que se sabe muy poco.
“Para ser un youtuber de éxito, si de verdad quieres petarlo, tienes que encontrar algo que no se haya hecho nunca”, le comenta al protagonista de ‘100 millones de visitas’ una de las miles de estrellas de YouTube.
YouTube nació con la prioridad de abrir espacios a la libertad creativa y ha terminado evolucionando en un negocio, alimentado a golpe de click por una forma de esclavitud digital.
El documental, con Itamar como hilo conductor, hace un recorrido por la evolución de esta plataforma, que llegó para quedarse, con la prioridad de abrir espacios a la libertad creativa de cualquiera. Sus millones de seguidores creyeron en el sueño que YouTube prometía: convertirles en famosos y enriquecerles, a cambio de su intimidad. Visualizaciones que significaban mucho dinero para YouTube y que como buen recurso de internet, se actualizó para que lo viral se adaptara a su nuevo modelo de negocio.
Ahora “los me gusta” ya no tienen la importancia de las suscripciones. “Tengo una audiencia de dos millones y he logrado convertir mis seguidores en millones de dólares”, cuenta una youtuber. “Cuando no sabes cómo gana dinero un sitio web, es porque tú eres el producto”, asegura un asesor de YouTube, experto en algoritmos.
Itamar descubre el funcionamiento real de YouTube. “YouTube es un actor político. Tiene intereses y ejerce su poder”, asegura una de las expertas en Internet. Miles de contenidos “inapropiados” desaparecieron en pos de los anunciantes, los usuarios se sintieron defraudados y lo peor, muchos se arruinaron.