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Amigo lector... ¿conoce usted cómo es el funcionamiento de su cerebro? ¿ No tiene ni idea ? Puede que no sea así, intentaré refrescarle la memoria...
Nuestro cerebro, es obviamente muy complejo, sin embargo, funciona con un mecanismo más simple que el de un chupete: la identificación. El cerebro no es que funcione exactamente como un simple ordenador que graba, guarda, registra, borra, recicla y elabora la información que recibe, pero sí podríamos decir, que funciona como una especie de ordenador de futuro, multifunciones y autónomo , capaz de gestionar la información mas compleja y profunda que existe : la información emocional.
Toda información emocional que a lo largo de la vida nuestro cerebro va recibiendo, desde la más temprana infancia hasta el presente, es guardada por éste en pequeños archivos informáticos. Esta información emocional, puede quedarse de por vida guardada en sus pequeños archivos sin ser utilizados jamás, y también puede uno rescatarlos y trabajar sobre ellos, para crear en relación a éstos, otros mejorados y actualizados.
Pero hay un mecanismo que enciende automáticamente cualquiera de los archivos que la mente haya registrado y guardado, y es el proceso identificativo. Para que me entiendan, pondré un simple ejemplo : imagina que has nacido en un pequeño pueblo donde viviste desde tu tierna infancia hasta los quince años, y allí , tus amigos y la gente del lugar te llamaban por el diminutivo de tu nombre, pongamos ''TITO''...
Después te marchaste del lugar a vivir a otro país y, en este, tu vida evolucionó: estudiaste, te casaste, tuviste hijos, incluso hiciste una gran carrera profesional de reconocimiento por el que se te acostumbra a llamar Ilustrísimo Señor Don... Casualidades de la vida, 30 años más tarde regresas a ese lugar donde pasaste tus primeros 15 años de vida: bien, pues en ese lugar y de manera automática, tus archivos emocionales guardados irán saltando uno tras otro, por el proceso identificativo, y tanto para los demás como para ti mismo, seguirás siendo TITO, y sentirás por cada persona que conociste antaño, exactamente lo que emocionalmente tu cerebro guardó en sus archivos.
Eso es lo que puede hacer, por ejemplo, que sientas por ese guardia del parque que corría tras de ti y al que tanto temías ,que pasados treinta años, sientas automaticamente lo mismo que sentiste cuando tanto le temías, pero esto no es todo, pues el proceso identificativo es recíproco, por lo que el viejo guardia, también te identificara mediante sus archivos automáticos, como TITO, ese pequeño diablillo que tantas trastadas y disgustos le causaba, lo que provocará una actualización inmediata de esos archivos por parte de los dos , creando y actualizando nuevos archivos que se adapten al presente.
Este proceso se repetirá igualmente con todas las personas que trataste, desde un antiguo novio, amigos, primos, tíos, conocidos... y tus archivos se abrirán automáticamente uno tras otro dependiendo de la carga carga emocional que registraron, pero también puede darse el caso, de que esos archivos al ser abiertos no puedan ser actualizados facilmente, caso de archivos emocionales conflictivos llenos de culpas, complejos y cargas morales, archivos que para su tratamiento requerirían un trabajo más complejo .
Así funciona nuestro cerebro, cada segundo o situación de nuestra vida crea, recicla y actualiza viejos archivos, pero jamás los borra . .