Break Bad (v):
1-. Desobedecer a la autoridad
2-. Desafiar las convenciones
3-. Elevar el infierno
"Breaking bad" es una locución típica del sur de los EEUU que viene a definir aquel momento o situación en la que una persona se desvía de su camino hacia otro "peor", tomando el "camino incorrecto", siempre según la interesada opinión de la moral bienpensante impuesta por nuestra sociedad.
ENCADENADO CEC SERIES: ¡VUELVE BREAKING BAD! ¡"EL CAMINO" YA TIENE FECHA DE ESTRENO EN NETFLIX!
"Breaking Bad", y esto ya lo hemos dicho muchas veces, fue una de las grandes joya de la edad de oro de las series de televisión. Este artículo es para todos aquellos que aún no hayan tenido la suerte de poder saborearla.
La recomendación va a ser clara, enérgica y arriesgada: esta serie no se la debe perder nadie, absolutamente nadie, porque cualquier persona puede llegar a disfrutarla, sean cuales sean sus gustos e intereses. Y no se trata de una serie de masas, pero no imaginamos a alguien que no se enganche, en un momento u otro, a tal maravilla. Podemos garantizar a cualquiera que esté leyendo estas líneas que, si le da la oportunidad que de sobras merece, así será.
Advertencia previa: Esto no sucederá ni en el capítulo piloto, ni en el segundo, ni en el tercero. Será más adelante, pero será: la serie te acabará enganchando y arrastrando hacia sus dominios y demonios, hasta que llegue ese punto en el que seas otro de sus fieles amantes. Te seducirá aunque no quieras ser seducido. Te enganchará aunque no quieras ser adicto.
Quizás algunos dirán que cualquier serie tiene que engancharte desde el principio, pero esta serie les enseñará no tiene por qué ser así, precisamente porque estamos hablando de una serie, y no de una película de 2 horas. En las series importa el recorrido, y poder crear a cada paso nuevas situaciones, llegando finalmente al punto que el creador quería mostrarnos. Y que nadie se confunda: los primeros episodios no son malos, la calidad rezuma siempre en el ambiente, incluso en los títulos de crédito iniciales (siempre insertados tras una intro que varía de formato con el tiempo). Pero no enganchará a todos, algo que sí sucederá con el paso de los capítulos. Si sigues adelante, ocurrirá.
Género: El capitulo piloto no deja nada claro qué tipo de serie estamos viendo. Quizás muchos crean, tras verlo, que se trata de una serie de humor y aventuras. Quienes hemos visto más capítulos, podríamos describirla como existencialista. Primer gran error: no intentemos definirla. Podríamos decir que es un drama con elementos de thriller y con unos notables toques de humor negro, y aunque muchos la sitúen en el nuevo concepto para definir las series que mezclan humor y drama, "dramedia", lo mejor es olvidarse de intentar definirla, y acercarse a ella con una actitud concreta, que pasamos a describir.
Una actitud del espectador ante la serie: Para disfrutarla en toda su magnitud, uno debe acercarse a ella con ganas de SABOREARLA. Es importante que esto sea así. No hay que tomársela como un mero entretenimiento (aunque también se pueda ver así), porque estarás perdiéndote mucha parte de su rica ESENCIA. La mejor opción es prepararse para verla, tener la mente abierta, acercarse con curiosidad, con ganas de ver más que lo que está sucediendo en la pantalla, y darse cuenta de que debajo de lo que vaya sucediendo, van cociéndose unas intenciones. Nada es gratuíto en esta serie, y todo lleva un 'quid' de las diferentes cuestiones que, finalmente, podrás ir divisando, aunque siempre caminando en la senda de lo impredecible.
Argumento: Tampoco es muy indicado hablar del típico "de qué va". Lo haremos ahora mismo, pero que esto no signifique nada: prejuzgar esta serie, incluso imaginarla, es sinónimo de equivocación.
Image by popculturegeek.com via Flickr
Walter White es un profesor de química, padre de família y esposo, aunque en realidad pronto sabremos que se trata de un genio (minimizado por la sociedad y por su propia família) al que le es diagnosticado un cáncer de pulmón terminal. No hay posibilidad de que la situación de la enfermedad se revierta y es precisamente el saber a ciencia cierta que su muerte está tan próxima y segura lo que le libera de sus lastres y cadenas.
El espectador conoce, desde el inicio de la serie, el fatal desenlace hasta la supuesta e inevitable muerte del protagonista, pero lo más importante será conocer a fondo los entresijos de su nueva y agitada doble vida, convirtiéndonos en un cómplice de todos sus actos: en pocos capítulos, Walt será culpable de asesinato, secuestro, tenencia ilícita de armas, trafico de estupefacientes y todo lo que os podáis imaginar. Sin embargo, todo esto podrá quedar justificado por un maravilloso guión, que irá transformándolo todo...
Pronto empezará a crearse en el espectador una serie de dudas morales sobre cada uno de sus actos y mentiras (este es el tema clave de la serie y de nuestra forma de vivir, la mentira, el autoengaño, la falsa apariencia y sus consecuentes frustraciones y desastres derivados de ella), y disfrutaremos de que sea culpable aunque su coartada moral sea cada vez más inconsistente. Los malabarismos que el protagonista tendrá que hacer para no ser descubierto entre la vida en familia, su labor en el instituto, la preparación y distribución de la metanfetamina, son creíbles a la vez que inesperados, emocionantes a la par que extraños.
Pero como ya quedó dicho, no se trata de una serie de aventuras ni de una comedia. No: nos dirigimos a la muerte cuestionando toda una vida, la de todos nosotros. Y el planteamiento es crudo y, por momentos, duro e inaceptable, seguro, para muchas de las personas que estarán viendo la serie.
No se vayan: están ante un producto realmente bueno, y quizás sea el momento, para todos, de abrir los ojos ante el mundo, el de verdad, el que no queremos ver. Y ese mundo es sucio, desagradable, falso, represor, violento y corrupto. Y está lleno de drogas, mentiras, traiciones y suciedad, admítanlo, por todas partes. Dejemos de hacernos el ciego o mirar hacia otro lado, pues no va a servir de nada. De nada más que para minimizarnos, dejar que se aprovechen de nuestra inocencia, y hacernos daño a nosotros mismos. Aceptémoslo como primera base real de nuestra propia existencia en este mundo.
Narcotraficantes, drogas, drogadictos y metanfetamina: Se nos muestra el mundo de las drogas y el narcotráfico tal cual es, sin tapujos ni censuras, desde múltiples puntos de vista y a través de una óptica realista, mostrando el entorno por el que se mueve, sus consecuencias y razones de ser, acercándose a una realidad que no queremos ver y que no nos quieren mostrar. Y nos lo muestra desde las más altas esferas hasta el consumidor más degradado de la sociedad.
En este sentido, este es un tratado más completo y fiel a la realidad que el que puedan ofrecernos las laureadas películas que trataron este tema, como "Réquiem por un sueño" o "Trainspotting" (con las que guarda ciertos parecidos argumentales).
Algunos apuntes necesarios sobre este tema:
- La droga que se consume, fabrica y vende es la metanfetamina, o el Crystal meth, un producto derivado puramente químico que no involucra ningún componente agrícola, no requiere crecer en un bosque o campo, como la marihuana o el opio. Es un producto únicamente fruto del conocimiento científico, como la bomba atómica, lo cual es interesante, pues la bomba atómica fue inventada en Nuevo México, justo donde transcurre la acción en los momentos clave de la serie.
Image by popculturegeek.com via Flickr
- Por similitud argumental, y por defecto de oficio, muchos la han emparentado con "Weeds". No se parece en nada, y ésta es muy superior a aquella, sin que esto sirva para desmerecer aquella otra.
- Uno de los familiares de Walt, en concreto su cuñado, trabaja para la DEA, la policía que se encarga de perseguir el consumo y venta de drogas en los USA. Si te ha parecido un tópico, aprovecharemos para decir que la serie nunca cae en un sólo tópico, y podría incurrir en muchos. No lo hace: sólo será un argumento tópico para aquel que no vea la serie y lo imagine.
Profundos dilemas morales y variedad temática: La infinidad de temas que se tocan ocuparía varias páginas, teniendo en común (todos los propuestos), que nos habla de cuestiones fundamentales en la vida de cualquiera de nosotros y de la sociedad de hoy en día: el autodescubrimiento en situaciones límite, la apariencia y la hipocresía como método de funcionamiento de nuestro mundo o las ironías, casualidades y diversos azares en nuestra vida, que pueden ser determinantes.
Prejuícios: En este caso más que en ningún otro, fuera todos los prejuícios. Acércate con una actitud positiva a esta serie y no lo lamentarás. Para empezar, quitate todos los prejuícios que acabas de acumular al leer esta síntesis sobre la propuesta argumental que "Breaking Bad" nos presenta. No es un dramón por el hecho de que su protagonista tenga cáncer, ni una comedia por el conjunto de situaciones planteadas. Si ya hemos hablado de que es mejor no intentar definirla, también será mejor que no intentes adivinarla. Porque el gran secreto de esta serie, lo que la hace genial es, sobretodo, ser tan impredecible. Hasta el punto de que, llegados a un punto, te arrastrará quedando tú, espectador, a merced de sus caprichos. Y estarás encantado de que así sea, porque sus caprichos son geniales y te acabarán haciendo bien.
Reacciones inesperadas: Las reacciones de los protagonistas son raras. Tan raras como somos, realmente, todos nosotros. Somos extraños, y nuestras reacciones podrían ser bastante extrañas si fuéramos siempre nosotros mismos y no aparentásemos tanto lo que no somos. Si no lo son, es porque sabemos actuar en el gran teatro del mundo, y porque hemos aprendido a sobrevivir, haciendo lo que hay que hacer y diciendo lo "correcto" para quedar bien y ser considerado 'normal'. Es decir, hacemos todo lo posible para intentar ser uno más y cumplir con lo que se espera de nosotros. Una pena.
Pero Walt, el protagonista, perfectamente interpretado por Bryan Cranston (ganador de un Emmy por este personaje y conocido por ser el padre de "Malcolm"), encarna a un padre de família que durante toda su vida ha llevado una vida 'normal' al que, de repente, una enfermedad mortal le da el 'poder' para actuar como siempre ha querido. ¿Triste? REAL.
Esto le lleva a él, y a todo su entorno, a las antípodas de la normalidad. También nos lleva a nosotros a escenas extrañas que, sin embargo, están totalmente justificadas tanto por la calidad del guión como por los tiempos que corren, que tendrían que haber sacado la venda de los ojos a más de uno, y de dos...
Walter White aprovecha sus conocimientos como profesor de química para fabricar y vender metanfetamina, puesto que su nuevo objetivo en la vida, a parte de poder decidir por él mismo de una vez por todas, es el de dejar el dinero suficiente para su família una vez esté muerto: amor auténtico, auténtico amor. Del de verdad.
Nos situamos ante de uno de los dilemas clásicos de la ficción, el del bien y el mal, puesto que está fabricando una de las drogas más malignas para la humanidad a la vez que sabemos que lo hace por una buena razón. Curiosamente, nos pondremos de su parte, no por ser el héroe ni porque el fin justifique los medios, sino por el inmenso trabajo de guion que hay detrás de esta serie, sintiendo como nuestros sus problemas. "Curiosamente", su primera, justa y buena intención, acabará cambiando y pudriéndose también: cuanto más poder acumule más se sentirá con el agua al cuello.
Aaron Paul: queremos destacar, junto al actor ya citado, la gran labor del segundo gran protagonista de esta serie, el actor que interpreta magistralmente a Jesse Pinkman, que no siempre coincide con su compañero de fatigas en pantalla. De hecho, parece que estos dos actores hayan nacido para protagonizar esta serie, pues ambos están soberbios en su papel de perdedores eternos que, por una vez, intentan tener éxito.
RESUMIENDO...
Primeros episodios: El capitulo piloto no va a gustar a todo el mundo, y puede que tú, potencial futuro seguidor de la serie, no te sientas lleno tras verlo. Quizás no sea, incluso, el piloto perfecto. Menos gustarán el segundo y tercer capítulo, con escenas duras, rudas y algunas incluso desagradables para ciertas sensibilidades, que enfrentan al espectador con la muerte, el cáncer en un estado avanzado y ciertas situaciones derivadas del tráfico con drogas que pueden resultar demasiado 'sucias' para según qué espectador. Pero todos tendrán un dato: lo que parecía una comedia de aventuras en el primer capitulo, o quizás un futuro drama, se nos ha convertido en un thriller algo desagradable. Además, ya habremos sido capaces de ver lo diferente que es la serie, las extrañas reacciones de algunos de sus protagonistas, y las intenciones soterradas de la serie. Algo se está fraguando, esa será la sensación del espectador tras el tercer capítulo.
El consejo: sea lo que sea lo que te haya podido incomodar de todo lo que ya hemos citado, sigue adelante con ella. Confía en ella. Serás ampliamente recompensado. Debes tener claro que la primera temporada de la serie (de tan sólo 7 capítulos), sienta las bases de una historia que, en su temporada 2, alcanzará unas cotas de genialidad y excelencia que no podrás negar. Y no es que los primeros capítulos sean malos, la calidad se adivina en todo momento, pero señores esto es una serie, y las series no son películas: las series están, siempre, por desarrollar, que es lo que en realidad nos atrae más de este formato y lo que le da sentido al formato. Cuando termineis con la temporada 2, os daréis cuenta de que los guionistas han elaborado un arco argumental que empezó en el ya citado piloto.
¿Cómo es posible?: Esta es la pregunta que late durante toda la serie, apoyada a partir de la temporada 2 en unos flash-forward que harán las delícias de los que les guste adivinar lo que puede suceder en un futuro inmediato en la serie. Sin embargo, seguramente fracasarán en sus predicciones.
Vince Gillighan: El currículum de su creador no es tampoco algo que deba importarte. Vince Gillighan fue uno de los productores y guionistas de "Expediente X", uno de los productores ejecutivos de "The lone gunmen" y uno de los escritores de "Hancock", algo que no tiene ningún tipo de trascendencia en esta producción para la cadena emergente AMC. Lo único que debe importarnos es que este invento le ha salido realmente bien, y que se nota que todo está muy pensado y muy bien trabajado. Los guiones son puro caviar, y las situaciones que se nos muestran están muy bien calculadas y, finalmente, logradas. Logradísimas. Es un producto muy controlado y bien trabajado.
Otros puntos importantes a destacar:
- La forma en que consigue transmitir todos los sentimientos y sensaciones que padecen los personajes, así como hacernos vibrar con la emoción e incertidumbre de lo que pueda pasar en cada una de las originales situaciones planteadas, siempre buscando la verosimilitud de un argumento realmente difícil de creer si no fuera por un trabajo tan elaborado en el guión.
- El mejor uso de los 'flash-forwards' de cuantos yo he visto en televisión. Sobretodo en la temporada 2, este recurso narrativo de última generación es utilizado al principio del capítulo para hacer imaginar, intuir o adivinar al espectador qué es lo que puede suceder en un futuro inmediato: no lo intenten, fracasarán. No es el único uso que se le da al 'flash-forward', puesto que tras el visionado del capítulo en el que vuelvan a aparecer con más claridad las imágenes que ya habíamos visto, premian la atención del espectador, algo que es necesario e importante desde el primer minuto de la serie.
- Los magníficos diálogos y sus distintos registros, desde el más vulgar hasta el más culto, desde el menos existencialista hasta el más profundo, gracias a un guión elaboradísimo que nos plantea constantes dilemas morales y nos abre interrogantes puntuales y cuestiones vitales y eternas sobre nuestra existencia.
- La magnífica fotografía, la excelente realización y dirección y el acierto absoluto en todos los protagonistas secundarios.
- La transformación de Walter White en Heisenberg. No voy a detallar mucho más en este caso, quienes la hayan visto me comprenderán, quienes se dispongan a verla, mejor que lo disfruten sin saber nada.
Crítica (s) y 'pero(s): Ningún elemento negativo a DESTACAR. Como dicho, tras llegar al final de la segunda temporada, uno entiende el arco argumental trabajado desde el primer capítulo, y no sólo queda todo más que justificado, sino que uno puede entender, tras un segundo visionado, que cada elemento tiene su función, y que cada capítulo es una obra de arte que conforma, finalmente, una obra maestra que hoy ya es serie de culto y que seguirá siéndolo en los próximos años, cuando esta serie sea descubierta por muchas más personas que sabrán valorarla en su justa medida: la matrícula de honor.