32px|alt=W3C|link=https://validator.w3.org/✓ The source code of this SVG is valid. Category:Valid SVG Deutsch: Breaking Bad Logo (Photo credit: Wikipedia)
Hoy termina Breaking bad en los Estados Unidos, con el último capítulo, el 5x16. No voy a intentar hacer una crítica completa de la serie, en la web ya hay diversas y muy buenas todas. Tampoco os voy a dar motivos para verla porque son tantos… simplemente quiero contaros como la descubrí, la descubrimos, mi hija y yo...
Por motivos que no vienen al caso, paso mucho tiempo en casa y, cuando tengo algún rato libre, me escapo al ordenador y me meto en alguna página de series, como por ejemplo, www.culturaencadena.com. Accedo a su catálogo de series, y normalmente empiezo por la A, voy viendo serie a serie, su argumento y demás datos, elijo y luego me dispongo a ver el piloto.
De esta manera he descubierto casi todas las buenas series que he visto y muchas malas que desecho al segundo capítulo -si estoy generosa-, otras a los cinco primeros minutos.
Soy fanática de los episodios pilotos de series. Es la mejor carta de presentación, y los hay que son una auténtica obra maestra. En este caso no tardé en encontrar la serie.
Breaking Bad (season 1) (Photo credit: Wikipedia)
Lo primero que me llamó la atención fue el cartel. Un individuo de mediana edad con gafas, en medio de un paraje desértico, con una camisa de color verde militar y la mitad del faldón de ésta remetida dentro del calzoncillo, sin pantalones pero con calcetines y zapatos. Piernas separadas y en la mano derecha una pistola que no apunta a nadie, mirada desafiante y al fondo a la izquierda una caravana blanca de la que sale un abundante humo color ¿rosa? Porque de ser así es una manera muy sutil de introducir al otro protagonista de apellido Pinkman.
Comencé a ver la serie yo sola: ¡qué magnífico inicio de serie con la introducción de los personajes, cada uno en su momento, sin saber bien si eran principales o no. Todo perfectamente orquestado, surgiendo como una sinfonía. Fantástico.
Pero, como cada vez que algo me gusta mucho, tenía que compartir. No podía estar delante de ese pedazo de serie sin poder comentar, ojiplática y sola.
Esto era a mediados de Junio del 2010 y teníamos que coger un pequeño tren de cercanías para llegar a las fiestas de san Juan, las fiestas de mi ciudad. Siempre que he tenido que ir con mi hija de caminata, y como no le gusta andar, me he dedicado a contarle cosas, a hacer que se olvide de lo que no le gusta y desvíe su interés a algo más apetecible.
De esto recuerda perfectamente como, subiendo una cima en el Pirineo con solo seis años aprendió a hacer la “tarta de galletas” para su cumpleaños, en otra ocasión nos entretuvimos en contar del uno al cien en inglés, ahora con trece años y para amenizarle el recorrido hasta la estación decidí contarle lo que llevaba visto de Breaking Bad.
Un par de kilómetros da para profusión de detalles y descripción de situaciones, paisajes y protagonistas.
(Ahora toca un paréntesis de reflexión moral. Tal y como están las cosas, a veces da un poco de reparo recomendarle a los hijos series, libros, donde los “malos hábitos” es lo común, pero esto lo puede encontrar en la calle y una buena serie, guiada por los padres no puede hacer daño a nadie. Fin paréntesis moral)
No sé si fue la conjugación de mala suerte de White y Pinkman, ese tremendo episodio en que se dedican a disolver un cadáver al que asistí con un expectante y divertido horror, esa bañera chorreante o qué fue de todo lo contado lo que le impactó, pero en acabar las fiestas, nos vamos cinco días, estaba decidida a verla. Descargamos todos los episodios y no me importó en absoluto volver a ver los tres o cuatro que ya había visto y quedamos profundamente enganchadas de breaking bad, de sus miserias, su humor más que negro y la difícil amistad de sus protagonistas.
Breaking bad tiene genialidades que se pueden analizar una a una. Canciones, malos malísimos que dan mucho miedo, situaciones absurdas de las que es humanamente imposible salir, grandes trailers oficiales de temporada…
Ahora esperamos ilusionadas, con miedo también por el final del último capítulo, lo que nos dará esta tan deseada cuarta temporada. Estoy segura que a ningún de las dos nos va a defraudar.
Ahora estamos trabajando con mi marido para que se enganche que, aunque es más de ciencia ficción, está dejándose suavemente introducir en la malgama de malas intenciones de la serie.
Os dejo tres vídeos.
Uno de tomas falsas fantástico con una frase que no quiere salir:
El corrido de los Cuates de Sinaloa que no tiene desperdicio y que aparece, si no me equivoco, en el primer episodio de la tercera temporada.
Y, como no, una promo de la cuarta temporada.
Si lo disfrutáis la mitad que yo, tenéis diversión asegurada.