[Este articulo desvela la parte fundamental del final de la cuarta temporada de Dexter, y detalles poco importantes de la quinta]
Me gustan los asesinos en serie. Cuando lo digo en voz alta la gente me mira extrañada.
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¿Los qué? – me preguntan esperando haber oido mal.
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Los asesinos en serie –contesto con una media sonrisa.
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Pero… ¿la violencia? –comienzan a escandalizarse gradualmente, al ver que no es una broma.
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Uy no, no me gusta la violencia, me pongo mala cuando veo sangre y ni te cuento cuando veo un cadáver, aunque sea en la tele.
A partir de ahí, mi desconocido encoge los hombros, tranquilizándose porque no soy una loca (o tal vez esperándolo en silencio), y cambia de tema. Os contaré algo: el hombre de mi vida fue el que no encojió los hombros, sino que me miró interesado y me hizo la pregunta mágica: ¿Por qué?
Pues porque la mente humana es fascinante y maravillosa. Siempre me pregunto como piensa un asesino en serie, qué se le puede pasar por la mente para hacer semejantes brutalidades, cómo ha vivido y como siente para que le parezca aceptable, e incluso deseable, algo tan horrible como quitar una vida humana. Tal vez por eso, no puedo despegarme, temporada tras temporada, con DEXTER.
Hemos pasado de todo juntos, hermanos psicópatas, compañeros de fechorías salidos de madre que no respetan el código, asesinos que inspiran a EL asesino. Sin embargo, el final de la cuarta temporada me dejó totalmente sobrecogida. Siempre pensé que Rita era algo más que la “tapadera” de Dexter. Para mi, era la que verdaderamente le hacía sentir, eso que él considera que tiene vetado, era su anclaje al mundo, el real, el cotidiano. Con la escena de Rita muerta en la bañera, totalmente desangrada mientras Harrison llora a sus pies, algo se revolvió en mi interior. Y me di cuenta que era empatía, que era lástima por Dexter. OJO! Nada de lástima por Rita (un personaje bastante soso y lineal), lástima por Dexter, por Harrison y sobretodo, unas ganas locas de ver como se superaban los guionistas en la esperadísima quinta temporada.
Varios meses después, y con ocho capítulos de la quinta ya emitida, solo puedo levantarme de mi asiento/sillón y aplaudir. El nuevo personaje que da la réplica al Dexter asesino, una magnífica Lumen interpretada por Julia Stiles, es totalmente complejo. Alguien que nació y creció normal, pero que sin que se diera cuenta, aceptó al oscuro pasajero en su asiento trasero.
La vida para Dexter ha cambiado por completo, a caballo entre su preocupación porque Harrison se convierta en él mismo, y la de que Lumen le descubra; tendrá muchas nuevas tareas pendientes con la red de psicópatas que subieron al pasajero oscuro en el coche de Lumen, y con su ¿cuñado? Quinn.
Muchos se preguntan si Lumen será la sustituta sexual/amorosa para Rita y sinceramente creo que eso es lo de menos, esto no es Gossip Girl para que la preocupación del espectador deba ser la vida amorosa de Dexter, pero sin duda alguna, Lumen debe ocupar un rol en la vida de nuestro asesino y la pregunta evidente queda en el aire: ¿Cuál será?
Supongo que también es porque el objetivo de la temporada es Dexter teniendo sentimientos.