Hace unos días hablábamos del estreno de FlashForward, la que parecía que iba a ser la sucesora de la mítica Lost, que el año que viene dirá adiós después de 6 temporadas. El episodio piloto cumplió con las expectativas (alimentadas con una brutal campaña de publicidad por Internet, con trailers, teasers, promociones, etc.): buen planteamiento de la trama, correcto desarrollo de la acción, presentación de los personajes y de sus visiones, y un final inquietante como pocos.
No obstante, después de 9 episodios, la cadena ABC ha decidido detener el rodaje de la serie y ha pedido a los guionistas que se replanteen su trabajo, porque en este corto intervalo de tiempo las audiencias en Estados Unidos han bajado de los 12 millones iniciales a los 8 millones actuales. ¿Motivos? Pues en mi opinión los guionistas están perdidos: después de un arranque espectacular, la serie ha entrado en una monotonía de la cual parece no poder salir. Los episodios tienen una preocupante falta de continuidad narrativa, van de un lado a otro sin sentido. La trama principal no avanza, hay investigaciones que no llevan a ninguna parte, una constante repetición de las visiones de los protagonistas, aparecen tópicos que hemos visto mil veces (persecuciones a ritmo de rock, por ejemplo), etc. A veces parece que sólo les interesa llegar como sea al final del episodio para darnos un caramelo que nos haga volver la semana siguiente, una constante (y de momento incumplida) promesa de que por fin empezará la acción de verdad.
Por otra parte tenemos el tema de los actores: no hay ni un personaje con el gancho suficiente para que nos identifiquemos con él. Alguien debería explicarle a Joseph Fiennes que no hace falta que ponga constantemente cara de perro apalizado, tanto si descubre un sospechoso como si pregunta la hora; su ayudante John Cho tiene el carisma de un aguacate y la misma aptitud para actuar que tendría yo para jugar en la NBA; Courtney B. Vance parece que sufra parálisis facial; Dominic Monaghan cumplía haciendo de hobbit en El señor de los anillos o de buenazo en Lost, pero como malo no te lo crees ni harto de vino; incluso Jack Davenport, al cual recordamos de la excelente Coupling, no termina de convencerme en su papel de “segundo malo”.
A pesar de ello, creo que la serie continua teniendo potencial (la premisa inicial es buenísima) y por lo tanto le daré unos cuantos episodios más de margen, mientras espero una mejoría que no sé si llegará. Quizás es injusto criticarla después de sólo 9 episodios y deberíamos esperar al final de la temporada para juzgarla. El globo estaba tan inflado que sólo se podía desinflar (eso si no termina explotando), y ahora las cosas deberían cambiar mucho para que las expectativas que había generado se vean del todo satisfechas. La serie tenía al público rendido a sus pies antes de empezar, pero una buena parte se ha cansado de darle oportunidades. Los productores lo saben y han pedido a los guionistas que espabilen. ¿Lo conseguirán?
Esto debe hacernos valorar aún más a series como "Lost", "Oz", "a dos metros", las más regulares, así como "Los Soprano", etc...
Yo o que más valoro es la regularidad.
La verdad es que con el piloto genial que hicieron, muchísimos picamos, y sigue habiendo adicción.
El tema es buenísimo, siempre pueden resucitarlo
Totalmente de acuerdo contigo Tony, con Nausica y con el dr. series, que ya sacó un post similar "Qué le pasa a Flash Forward" hace unas semanas.
A la espera de "Lost", a mí personalmente se me están acabando las series buenas ahora que he terminado con la impresionante segunda temporada de la grandiosa "Breaking Bad", que aprovecho para recomendar a todos.