El corto cuenta la historia de dos parejas. La primera de ellas está formada por un matrimonio de clase alta que cumplen los 17 años de casados. La segunda está formada por un matrimonio ecuatoriano, cuyo hijo pequeño, que aún vive en Ecuador con su abuela, están deseando poder traer a nuestro país.
El día de la celebración del aniversario de la pareja de clase alta coincide con el cumpleaños de la mujer ecuatoriana. Es viernes, día en que los dos sirvientes libran. Pero sus señores les comentan, por separado, que esa noche no pueden librar, porque vendrán invitados y tienen que prepararlo todo y atender a dichos invitados.
La señora sugiere a la sirvienta que puede preparar una cena típica de su tierra, algo que agradecerán los comensales. El señor, por su parte, comenta al sirviente que será un buen momento para estrenar el nuevo uniforme reservado para las fiestas. Pero nada será como esperamos, con un giro en la historia que nos dejó maravillados...
“17 años juntos” es un cortometraje cargado de sentimientos, emociones e instantes de humor, siempre característicos en las obras del director y guionista, Javier Fesser, que hace creíble la situación, despertando sonrisas... y también la emoción, con algunas lágrimas finales.
Y es que la popular entidad bancaria, que también cumple 17 años, sigue (de)mostrando su calidad humana y la importancia que para ellos tienen sus clientes con detalles tan sensibles y concienciados como el que en esta ocasión nos vuelven a regalar.
Tras la proyección del cortometraje, tanto el equipo de ING como el propio Javier Fesser atendieron a los medios de comunicación allí reunidos. Allí pudimos corroborar la importancia que ha tenido la dirección de casting de actores, pues deseaban que los personajes proyectasen esa verdad y esa sinceridad que encierran las personas con las que nos encontramos día a día. Y sin duda lo consiguen.
Desde CEC preguntamos por cómo había surgido la brillante idea de la que había resultado tal obra. María Alonso, directora de Marketing del reputado banco, recordó que en ING les gusta obsequiar a sus clientes cada año con un detalle especial, y en esta ocasión contactaron con Javier para un proyecto diferente.
Un proyecto que no solo es un nuevo regalo con el sello de calidad de ING, sino que además se convierte, por sí solo, en una pequeña joya cinematográfica que podría presentarse en cualquiera de los mejores Festivales de cine del mundo, como apuntamos desde CEC y corroboraron el resto de asistentes presentes en el acto.
Finalizamos esta reseña, en línea con el espíritu generoso de la entidad bancaria, recomendando el visionado del corto, completo, a todos nuestros lectores y suscritos, y participando de él. Felicitando a la entidad bancaria por tan genial iniciativa, y deseándoles que cumplan muchos años más de éxitos sin renunciar a la calidad humana y cercanía con el cliente. En tiempos como los que corren, se nos hace imprescindible poder confiar en nuestro banco. Y, por supuesto, dándole nuestra más sincera enhorabuena al gran Javier Fesser, del que queremos ver mucho más cine. ¡Y que sea pronto, por favor!