Existe en Buenos Aires un lugar que pocos conocen, pero del que casi todo el mundo habla. Detrás de un paredón insípido y de una puerta que no dice mucho, están los restos de una catedral gótica, donde funciona un singular restaurante que ofrece una sola mesa. Todas las noches una última cena…”
Este texto es parte del inicio con el que Marcos Carnevale, guionista y director de “El espejo de los otros” nos adentra en un lugar mágico por el cual desfilarán diversas parejas e incluso una familia, donde como en ejercicios de psicoanálisis, los personajes van ofreciendo sus miedos, sus intrigas, sus miserias, sus alegrías, sus fantasías, sus sueños… Una parte importante de la que está compuesta la psique humana.
Marcos somete a sus actores a un ensayo interpretativo en pequeñas piezas teatrales y cuyo nexo entre ellos será dicha cena, en un restaurante con una sola mesa y con un gran escenario donde una banda irá interpretando, magistralmente, diversos temas relacionados con las historias que se irán relatando. He dicho bien, pequeñas piezas teatrales, porque Carnevale prescinde de todo aquello que pueda alterar la concentración del espectador en los personajes, oscureciendo e iluminando el decorado según el grado de dramatismo.
Hay algunos instantes donde la obra tiende a decaer, pero con acierto, el director la vuelve a situar en su estado de equilibrio y con precisión en la dirección de actores, logrando en ellos interpretaciones de gran calidad. Teatro dentro del cine o el cine homenajeando al teatro.
Una banda sonora espectacular dirigida por Gipsy Bonafina, una excelente fotografía a cargo de Horacio Maira y la sobrecogedora dirección artística de Mariana Sourrouille, consiguen que estemos ante una película más que interesante de ser visionada.
REPARTO: Norma Aleandro, Graciela Borges, Leticia Bredice, Alfredo Casero, Pepe Cibrián, Mauricio Dayub, Julieta Díaz, Luis Machín, Oscar Martínez, Javier de Nevares, Ana María Picchio, Favio Posca, Carola Reyna, Marilina Ross