"La muerte no pertenece a las mujeres"... "Pocas cosas nos pertenecen"
La coproducción entre Marruecos, Francia y Bélgica, ADAM está dirigida por Maryam Touzani compartiendo guion con Nabil Ayouch.
En la Medina de Casablanca (Marruecos) vemos por las calles a una joven embarazada, Samia (Nisrin Erradi), pidiendo trabajo puerta por puerta. Todos la rechazan hasta que llega a la casa-pastelería de Abla (Lubna Azabal) quien en un principio también declina su ofrecimiento. Samia, agotada, se sienta en un portal frente a la casa de Abla, donde al llegar la noche, se queda dormida. Abla sale en su busca y le ofrece alojamiento por tres días. La hija de Abla, que tiene 8 años, Warda (Douae Belkhaouda) se encariña con Samia y cuando se va, madre e hija la echan de menos y salen en su busca, ofreciéndole alojamiento hasta que nazca en bebé. Entre las tres se creará una interesante complicidad.
CRÍTICA DE LA PELÍCULA ADAM - CEC CINE
"Adam" es un filme modesto, intimista y lleno de encanto, dirigido con una sutileza que asombra, una veracidad que duele y un ritmo que va traspasando las fibras del espectador.
Una historia de tres mujeres: por una parte la de una madre y su hija viviendo una vida silenciosa, austera y triste, tras la pérdida del cabeza de familia, por el que Abla sigue enlutada. Del otro lado, la joven que busca un techo y un trabajo, mientras espera la llegada del hijo que lleva en su vientre.
Dos mujeres con el alma y el corazón heridos. Dos mujeres que chocan en un principio debido a sus fuertes temperamentos, pero que van sosegando y compartiendo lo poco que tienen, ante la necesidad de apoyarse la una en la otra. Mientras Abla le ofrece cobijo y seguridad, Samia logrará poco a poco que Abla despierte y recupere las ganas de vivir. Dos seres nobles cuyos destinos han estado marcados por el infortunio y la maternidad, en Abla la viudez y la hija que tuvo con su marido y en Samia el abandono cuando estaba embarazada.
Prácticamente toda la obra se desarrolla en el interior de ese hogar humilde, en el lugar en que ambas se sienten seguras, protegidas por esas paredes desnudas, aunque una de ellas sabe que por mucho amor que la ofrezcan, no es ni su lugar ni su destino.
Una obra con un carácter teatralizado pero ágil gracias a la esmerada y sutil dirección de Maryam Touzani, al fantástico guion que comparte con su marido Nabil Ayouch, cuyas páginas se abren como pétalos tímidos desprendiendo dolor, soledad, fortaleza, resignación y ausencia amor; por poner algunos ejemplos, hablándonos también del derecho a la igualdad y a disponer del cuerpo, como cada mujer desee.
Al dueto femenino tan magníficamente interpretado por esas dos grandes actrices, Lubna Azabal y Nisrine Erradi, dando vida a dos personajes poderosos que destilan humanidad y humildad; por supuesto no me olvido de la pequeña Douae Belkhaouda, que ilumina con su naturalidad e inocencia, un hogar oscurecido por la pérdida.
Mi nota es: 8
ESTRENO en ESPAÑA: 6 de Noviembre
REPARTO: Lubna Azabal, Nisrine Erradi, Douae Belkhaouda, Aziz Hattab y Hasnaa Tamtaoui.
PRODUCTORA: Ali n´Productions// Les films du nouveau monde// Artemis Films.
DISTRIBUIDORA en ESPAÑA: Karma Films
LA DIRECTORA
La actriz, guionista y directora, Maryam Touzani se graduó en la Universidad de Londres en periodismo.
Regresó a su país natal, Marruecos, donde comenzó a trabajar como periodista, especializándose en cine del Magreb. Tras un tiempo, se convirtió en guionista y directora de cortometrajes entre los que encontramos "Quand ils dorment" 2012 o "Aya wahl bar" 2015 y documentales como "Sous Ma Vieille Peau" 2014.
En el 2015 participó en el guion de la película de Nabil Ayouch "Much Loved". En 2017 se pone delante de las cámaras como actriz en el filme "Razzia" de Nabil Ayouch, colaborando también en el guion y el pasado año dirigió su ópera prima en el largometraje con "Adam", el filme que llega ahora a nuestras pantallas.
En palabras de la propia directora: "Adam nació de un encuentro real, doloroso pero inspirador, que dejó una marca imborrable en mí. Conocí a una mujer que me inspiró para el personaje de Samia. Esta mujer llegó a Tánger huyendo de su familia tras quedarse embarazada del hombre que le había prometido matrimonio, pero la abandonó. Muerta de miedo y de vergüenza, no se lo había contado a ninguno de sus amigos ni parientes y había escondido su embarazo durante meses. Tenía la esperanza de poder dar a luz a su hijo en secreto lejos de casa y entregarlo antes de regresar. Mis padres la acogieron cuando apareció en la puerta de casa, aunque no la conocían de nada. Se suponía que iba a quedarse unos pocos días, pero fueron varias semanas, hasta que nació su bebé."