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Hilarante resulta que Arthur Schopenhauer, uno de los influyentes en Nietzsche, escribiera un libro como este. Una serie de reglas para la vida que se titula, ni más ni menos, que "El arte de ser feliz en 50 reglas para la vida" (que no el arte de la felicidad). No me diréis que no deja de ser curioso. Bien, hace años, movida por esta curiosidad, lo compré y descubrí la PANACEA de la vida.
Lo complicado es luego aplicar lo que se nos dice en el libro porque, sobretodo los que descubrimos esta pequeña joya a una edad temprana, hay mucha falta de auto-conocimiento y mucha mala educación sentimental perpetuada por nuestros progenitores y fomentada por toda la sociedad. Hay mucha definición errónea corriendo por todos los lados porque favorece a muchos, básicamente a los "de siempre".
Es una muy buena lectura para saber leer las cosas con un poco más de sabiduría y sin tantas dosis de "humanidad" y "chimpanceísmo". Es bueno saber todo cuanto nos cuenta, es extremadamente recomendable para aquellos ofuscados mentales que bailan al ritmo de los tambores del jefe, del compañero, de la vecina... Es necesario para ahuyentar la necesidad humana socialmente establecida del "y yo más". No vais a ser ni mejores ni más atractivos diciendo "y yo más", vaya esto por delante.
Por eso, en pos de esa búsqueda y llevando la felicidad por bandera, nos hallamos ante los comportamientos típicamente humanos estúpidos y manipulados por el sistema.
Comprarse una casa con jardín (que CONDENA a una hipoteca prácticamente toda la vida), tener un hijo pensando que es la solución ante un matrimonio en crisis o ante un vacío propio, cualquier tipo de materialismo que se quiera poseer porque con éste se pretende rellenar un hueco en nuestro "ser" que no hay forma de saciar: es nuestro vacío existencial original inherente al ser humano y que, por el hecho de SER, ya tenemos o llevamos de serie.
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De aquí se deriva una muy larga lista de etcéteras que cada uno sabrá. Por cierto, el querer tener a la mujer más guapa, más delgada o al hombre más musculoso y más joven y más y más también forma parte de este querer tener o pensar que teniendo ESO, seremos más felices. Este último apunte no es gratuito puesto que, como he dicho, es una lectura que recomiendo encarecidamente durante el verano... y durante el verano ya se sabe lo que ocurre con las parejas, sus discusiones, sus rutinas veraniegas prácticamente los obligan a soportarse las 24 horas del día durante un mes cuando, durante el resto del año, sólo se ven un rato al día y los fines de semana. Ojo con estas cosas, leed el libro. Por cierto y ya que me va de paso, el trabajar tanto forma parte de todo lo que estoy hablando ¿Por qué se trabajan tantísimas horas? Dinero y tiempo... y no doy más pistas, que cada cual analice su situación particular que para eso tenemos la cabeza.
Por lo tanto, una primera cosa que el lector debería hacer es pensar en QUE es la felicidad a título personal. Qué es aquello que le hace "feliz". En cuanto al último párrafo se refiere y junto con esta frase, Schopenhauer saca a relucir una clasificación de los deseos según Epicuro (muy gran filósofo también y totalmente admirado por su ataraxia). Y dice así:
3. Bienes NI naturales NI necesarios.
Creo que esta es una de las claves para encontrar un equilibrio espiritual que, desde luego, responde a una austeridad. Y es que la sociedad del consumo nos ha hecho mucho daño a los que vivimos en ella porque nos han hecho pensar que teniendo más seremos más felices. Y han utilizado la felicidad como la excusa para v ender cualquier cosa. Felicidad que, por otra parte, no deja de ser un invento más para vendernos hasta el aire. Y, naturalmente, es un invento que ha calado estupendamente porque todos nos sentimos vacíos de algo. Lo que el humano no entiende o se niega a entender, es que no hay nada que se haya inventado sobre la faz de la tierra que sea capaz de borrar o alejar esa sensación de vacío. Las claves residen en uno mismo y pasan por el autoconocimiento y la autocomprensión. Nada más.
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"Nunca serás feliz si te atormenta que algún otro sea más feliz que tú"; "Cuando piensas cuántos se te adelantan, ten en cuenta cuántos te siguen" ambas frases de Séneca al que hace referencia.
"Al lado del carácter inteligible y del empírico, hay que mencionar otro que es diferente de estos dos, el carácter adquirido, al que sólo se consigue en la vida a través del ejercicio en el mundo, y del que se habla cuando se elogia a alguien como hombre con carácter o cuando se critica a alguien por su falta de carácter."
Hay que apuntarse esto porque, si bien todo el mundo desea, la uniformidad de miras y de pensamiento y, por lo tanto la falta de carácter que tanto se critica, se elogia el carácter al que, tanto se criticará después por tener demasiado carácter. Lo que sí es cierto, muy lejos de los que piensen los demás, es que tener una identidad propia es necesario y vital para sentirse alguien y estar ogulloso de uno mismo.
Si te interesa este autor, en el siguiente enlace podrás adquirir fácilmente alguno de sus libros:
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Arthur Schopenhauer: Selección de citas y frases en cadena (I)
La filosofía de Epicuro. Introducción
"Bajo las ruedas", Hermann Hesse
"MUJERES", de Charles Bukowski
"La conjura de los necios", John Kennedy Toole.
"El Gran Teatro del Mundo". Acto I. Schopenhauer, Calderón, Epícteto, Shakespeare
Felicidades por la opinión creo que la compartimos todos!
Escríbenos cuando quieras, no dejaremos que un alma intranquila se pierda en la inmensa estupidez que asola las calles!
Venga venga! Ya estás tardando!