DEL DIRECTOR DE LA EXCELENTE 'OSLO, 31 DE AGOSTO', recomendadísima por CEC CINE, y el guionista de la turbadora 'Blind'.
CON GABRIEL BYRNE ('IN TREATMENT', serie recomendada por CEC) Y ISABELLE HUPPERT ('LA PIANISTA', peliculón de Michael Haneke también recomendado)
- EL AMOR ES MÁS FUERTE QUE LAS BOMBAS supone el tercer largometraje del realizador noruego Joachim Trier, el primo lejano de Lars Von Trier, del que CEC CINE ya te ha recomendado sus 2 anteriores películas: Oslo, 31 de agosto en especial, y Reprise, su ópera prima.
- En el año 2013, Trier fue incluido con muy buen criterio en la lista de los “20 realizadores” a tener en cuenta por el prestigioso New York Times.
- La película ha sido rodada íntegramente en Nueva York en esta ocasión y cuenta con un reparto estelar encabezado por Gabriel Byrne, Isabelle Huppert, Jesse Eisenberg y Devin Druid.
La próxima exposición de las obras de la famosa fotógrafa Isabelle Reed, fallecida inesperadamente hace tres años, obliga a Jonah, su hijo mayor, a volver a la casa familiar y a pasar tiempo con su padre, Gene, y su introvertido hermano pequeño, Conrad, después de algunos años.
Aprovechando que están juntos, Gene intenta desesperadamente reconectar con sus hijos, mientras los tres se esfuerzan en reconciliarse con lo que sienten por la mujer a la que cada uno recuerda de forma diferente.
La película nos acerca a las relaciones entre padres e hijos y habla de las dificultades emocionales de una familia con sus recuerdos, sus ausencias y secretos. Trier, que siempre juega con los tiempos, inicia la historia tres años después de la muerte de la madre, plasmando el efecto dominó de su trágica muerte y de cómo afectó a su marido e hijos mientras cada uno intenta seguir con su vida.
El guion de la película está escrito por el propio Trier junto a su colaborador habitual, Eskil Vogt, quien el pasado año debutó en la dirección de largometrajes con la sorprendente “Blind”.
EL AMOR ES MÁS FUERTE QUE LAS BOMBAS atrapa al espectador por la original forma de mezclar libremente el pasado y presente, los sueños y la realidad. El largometraje participó en la Sección Oficial del pasado Festival de Cine de Cannes, siendo la primera película noruega aspirante a la Palma de Oro desde hacía 36 años.