Shiny happy people (Photo credit: Donna Cymek)
Esta tarde vi a una chica que bailaba en medio de la calle, sonreía y saludaba al resto de transeúntes. La gente la miraba con extrañeza, como pensando que le pasaba algo malo o estaba loca y ella, en lugar de intimidarse, bailaba más apasionadamente todavía… Es curioso que demostrar sentimientos extremos en plena calle provoque desaprobación y en cambio ir triste y con la cabeza baja esté muy bien visto y pase desapercibido…