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Comparado a obras tan excelsas en la historia del documental musical como "Don´t look back" o "Gimme Shelter"...
The White Stripes: Under Great White Northern Lights
Placer visual a rojiblancos borbotones con la banda más fotogénica (perdón, Franz Ferdinand) y ex-misteriosa (lo de “¿son los hermanos White?”, “¿ es su prima?”, “¿es un avión?” ya hace tiempo que se resolvió: es su ex-mujer) y garajerota (con Ledzepismos) del rock actual.
Under Great White Northern Lights se pega al dúo en el transcurso de una extraña gira por el Canadá profundo. Una gira realizada por la única razón que “nunca hemos hecho una gira entera por Canadá”. Así, The White Stripes empiezan a recorrer el país tocando en sitios raros (porches, cafés de carretera, una escuela) y casi por sorpresa, o por sorpresa del todo -a juzgar por las caras de pasmo de los fortuitos asistentes- compartiendo escenario con niños, presentándose educadamente -y sin darse aires- ante militares veteranos o un asilo para nativos innuits, tocando para cuatro gatos y dos osos, teorizando sobre banda y vida en la carretera, y en general siendo muy poco The White Stripes.
O sea, sin parecer una de las bandas de rock Más Famosas del Mundo, que es lo que son. Este es un filme sabroso e inaudito, realizado con un placer obvio, y una oportunidad única para ver a otros Meg y Jack (a veces cabreados entre ellos, a veces como viejos socios conspiradores), y encima captados de una forma elegante y sobria por la cámara certera de Emmett Malloy. Eléctrico como una tormenta canadiense.
Martes 2 20:15 Multisalas
Miércoles 3 18:00 Aribau Club 1
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