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La escenificación política de la campaña ya nos ha demostrado que, quien va por delante en las encuestas, el Partido Popular, representado por el señor Mariano Rajoy, no va a perder los papeles ni a arriesgar adelantando medidas que puedan hacerle perder la ventaja que ha conseguido, simplemente, con significar un cambio. Un cambio es lo que la gente quiere, y ese es, curiosamente, el gran motor de la prudente campaña del PP.
Anoche, en la entrevista de Antena 3 a Mariano Rajoy, y a pesar de que el próximo presidente de España hizo unas poquísimas promesas, quedó reconfirmada esta línea. Por cierto, fue un buen momento televisivo que recomendamos recuperar a los que se lo perdieran, mucho mejor y más natural que todo el paripé del debate programado y pactado del pasado lunes.
Da la sensación que la gran duda de ambos partidos en esta campaña ha sido la del guión de la misma, pues unos y otros no saben qué decir y qué no decir o evitar...
Qué decir sobre la ansiada reducción del paro, qué decir cuando en los últimos meses ha quedado claro que los políticos pintan bien poco ante el poder de los mercados en un sistema económico que ahoga el político. Y qué no decir, acerca de los recortes que van a ser necesarios, por poner el ejemplo más claro. Como mínimo, con tanta prudencia del lider popular, nos ahorramos, en este caso, un clásico de las campañas: las falsas promesas.
No deja de ser curioso, sin embargo, que un partido lleve una ventaja de 15 puntos sobre el otro sin apenas proponer nada concreto. Y raya lo surrealista el hecho de que todo el mundo sepa, empezando por los dos candidatos, que la economía mundial y por ende, de nuestro país, dependa de factores completamente ajenos a cualquiera de los dos partidos, se nos haya demostrado por activa y por pasiva que aquí quien manda es la economía y no la política y que, sin embargo, todos los ciudadanos esperen un cambio que empiece en la política.
Como mínimo, nos quedamos con una buena y nueva sensación: lo poco que se promete y adelanta de forma concreta en esta campaña, se va a cumplir, pues es escaso. El resto de la campaña, les pregunten lo que les pregunten, queda un poco en duda, y en este caso esta actitud se corresponde con la realidad y la actualidad, porque: ¿acaso alguien sabe qué va a pasar con esta crisis mundial, que no sólo española, cuando hace unos días toda Europa dependía de Grecia, y hoy depende de Italia? En estos momentos en que escribo estas líneas, parece que toda Italia y, en consecuencia la Europa del Euro, dependen de la actuación de un señor comunista de 84 años...
