Presentada en el pasado Festival de Sitges, Animal de Compañía juega un poco a ser un film de terror con alta carga psicológica que cuesta creer desde el principio pero que atrapa por su contundencia y tufo intencionado a Serie B.
Monagham se mueve como pez en el agua en este tipo del films, un rol que le sienta perfectamente mientras le llevará quizá a salón de las glorias de culto. Lost y El Señor de los Anillos son trabajos que para sí quisieran muchas otras estrellas.
Lo cierto es que esta fábula sobre la soledad queda en tierra de nadie a medida que avanza el metraje hasta llegar a un giro de guión tan tramposo y manido que uno no puede evitar pensar que se la han vuelto a colar.
Aún así, el catalán Carles Torrents tiene cada vez más papeletas para convertirse en un maestro del terror, algo de lo que estamos muy escasos en este país. Su buen pulso y su gusto desmedido por la violencia y la sangre, es justo el tipo de riesgos que nuestro cine patrio no acaba de correr.
Quizá por ello, Torrents decide rodar en inglés y con presupuesto de fuera.
Si os gusta el terror visceral, Pet hará todo lo posible por satisfaceros.