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Anteriormente se decía o se creía que la cuestión de la moral era un asunto puramente de los sacerdotes clérigos y cualquier persona involucrada con actividades religiosas, y se tenía la vaga idea que estas también eran personas de carne y hueso. Pero como siempre, las jugarretas de la iglesia católica, apostólica y romana hacían creer a todos a nivel mundial que alguien con atuendo de buen samaritano pasaba a ser desencarnado como alguien que no estaba manchado por la lujuria y el pecado, y este tiende a beatificar a la humanidad, a quienes consideran sus ídolos, héroes o cualquier payaso que se cree superior a ellos (disculpen los payasos, ustedes tienen más valor que estas bestias que se dedican a adorar a otros olvidándose de que son humanos).
Para no salirme del tema que entendemos por moral y de donde viene su apreciación y su descendencia, he ahí etimología, por eso le puse ese título.
Se supone que desde tiempos antiguos se hizo como unos mandamientos que se debían acatar para que las personas vivieran en paz y la humanidad se regiría con ellos. Detrás de todo eso no hay más que un sistema de control para nosotros, se olvidaron de mencionar a nuestros instintos o querer frenarlos en el proceso y esto se aplica al valor y el prejuicio en todos los aspectos y actividades de la vida que conocemos: cine, teatro, música, ballet, arquitectura, ciencia, deportes, política, trabajo, familia, lazos de amistad.
Espero y no se confundan, todo esto es como un análisis y a la vez una opinión que intento hacer lo más objetiva posible, las relaciones de amistad son las más superficiales, a estas conclusiones no puedes decirle a tus supuestos amigos que están de la chingada en sus vidas cuando tú ves todo a su alrededor como se está cayendo a pedazos, porque eso incluye que te tachen de amargado y muchas cosas más y la moral en si no es guardar apetitos sexuales o lujuria acumulada, es más que eso, la moral es emitir un juicio nítido viendo mas allá de las cosas que nos rodean.
Cover of Richard Wagner
Un ejemplo de esto es la obra de Richard Wagner que se publicó en 1870 que se llamaba "Ópera y drama", esto es una gran grosería. En esta obra de Richard Wagner surgió una completa contradicción teórica entre su anterior y su posterior fe estética, la primera expresada. En especial, y esto es lo que más sorprende, Wagner modifica sin la más mínima consideración, a partir de ahora, su juicio sobre el valor y la posición de la música misma; ¡que le importaba el que hasta entonces hubiese hecho de ella un medio, un médium, una 'mujer', que para florecer necesitaba absolutamente de una finalidad, de un hombre; es decir, del drama!
De un golpe comprendió que se podía hacer para mayor gloria de la música con la teoría y las innovaciones de Schopenhauer, es decir, con la soberanía de la música, tal como este la entendía: la música situada aparte enfrente de todas las demás artes, la música como el arte independiente en sí, no ofreciendo, como aquellas reproducciones de la fenomenalidad, antes bien, hablando el lenguaje de la voluntad misma, brotando directamente del "abismo", como la revelación más propia, más originaria, más derivada de este.
Todas las críticas fundamentadas en estos planos no son más que basura y una falta de moral enorme, estos pobres ilusos conocerán la palabra ética que tanto mencionan, no lo creo. Todos los comentaristas, narradores, locutores y demás narran las cosas desde el punto de vista fanático religioso y los escritores también, más los que se creen filósofos de academia. Hoy en día se tiene que recibir un maldito papel para que te llamen erudito jajajajajaja, esto es una porquería o filosofía o alguna otra estupidez, si fuéramos un veinte por ciento objetivos y narráramos las cosas de un modo transparente todo sería mas fácil para todos y habría menos confusión, pero siempre por delante los intereses y los rasgos de poder, escalar un escalón más sobre todos, vaya como siento desprecio por todo esto. Solamente los poetas son los que tienen pura el alma para leer esto y entenderlo en sí.
La palabra moral, como todas otras, han sido alteradas para que nos sometamos a su yugo como caballos de granja y no voltear a ningún lado. Ya es tiempo de despertar a todo, bestias engrandecidas de verdad, con las palabras en sus dientes listas para masticar a las falsas.