Ya estamos de nuevo. Ahora el enemigo son los controladores aéreos, ellos se han cargado la economía, ellos han jodido las
vacaciones de la gente y, por lo tanto, ellos son el anticristo. En parte, y si miramos a los hechos de forma objetiva, sin pensar, y sintiéndonos víctimas, es
verdad, pero pensando un poco, no es toda la verdad.
Los señores controladores aéreos tienen una posición de privilegio, pero hasta cierto punto. Las mentiras que se han vertido sobre ellos, poniéndoles en el ojo del huracán, y dejando a todos los demás exentos de responsabilidad me parece de un borreguismo feudal.
Estos señores tienen una posición de privilegio financiero, que nos guste más o menos, así se ha establecido y permitido por todos los estamentos sociales.
Esta problemática tiene una solución muy sencilla, que los millones de vagos de nuestro país estudien y se conviertan en controladores aéreos, que se dejen avasallar con jornadas inadmisibles, que se les ponga ante la opinión publica como pijos quejicas, que se les niegue el derecho a su jornada laboral y a sus vacaciones y a su derecho a la huelga.
Como elemento recurrente de esta democracia de la que inconsciente y borreguilmente alardeamos (también conocida en esta página como demogogia o tiranía de la mayoría) se afirma que lo correcto es que lo hagan en el marco constitucional, pero... ¿cómo hacer eso cuando después de 4 reales decretos en este 2010, sus servicios mínimos son de más del 80%?. ¿Acaso todos los que criticáis a los controladores hubiéseis aceptado que se os obligara a trabajar el día de la huelga general porque la ley así lo marca?.
Si seguimos por este camino, y más con la inminente subida del PP al poder, vamos a acabar en la línea de recortes sociales y legales amparados en el marco de la constitución de reducción de derechos. Hay muchas personas que sostienen que el derecho a la huelga es algo pasado con lo que se debe acabar.
Nunca dejará de sorprenderme la falta de empatía y la capacidad de juzgar a la gente de este país sin ser consciente de las circunstancias ni de las consecuencias.
A este paso, mi única recomendación para estos señores controladores, que a pesar de todo, considero que han equivocado su estrategia (mal negocio lo de ponerse a la opinión pública en contra), será que hagan su trabajo en las condiciones en las que están, hasta que algún día se estrelle un avión por ir a trabajar enfermo o profundamente estresado ya que a partir del ultimo real decreto no tienen derecho a tener bajas por enfermedad remuneradas.
¿Aceptaríais vosotros tan facilmente, presuntos damnificados por la atrocidad de estos señores, que por ley se os fueran recortando vuestros derechos, que os obligaran a recuperar las horas de baja laboral, a hacer muchas más horas de las que marca vuestro convenio, a vivir bajo el peso de la responsabilidad de gestionar vidas en esas condiciones siendo, además de perro, apaleado?
Ahora, los controladores son el enemigo, y con la opinion pública en contra, se han convertido en unos parias, incluso he oído varias opiniones de que se debería publicar su información personal como si fueran terroristas o pederastas.
A todos vosotros que condenais su actuación, la próxima vez que voléis, quiero que penséis que vuestro próximo vuelo puede ser controlado
por alguien enfermo y estresado, que ha sobrepasado su jornada laboral fijada y que está en el punto de mira de la opinión publica y aun así, vuestra vida depende de esa persona.
Hay que tener un poco de cabeza, que es lo que los controladores aéreos NO han tenido. Son tantas las barbaridades expuestas, que no sé ni por donde empezar.