Un quiero y no puedo de Apple TV+, que se ha estrenado con muy mal pie en el competitivo mundo de las plataformas con series
ANISTON NUNCA "DECEPCIONA"... TODAS LAS EXPECTATIVAS CUMPLIDAS
YA LO INTUÍMOS EN SU DÍA cuando vimos el marketing que se le hizo a "The morning show", la nueva serie "estrella" de Apple TV+. Todo apuntaba en una dirección: la del mainstream. Y es que su reparto es carísimo, todo un reclamo publicitario que nos debería garantizar la calidad de la serie. Pero en el mundo del entretenimiento ya sabemos que 2 y 2 no tienen por qué sumar 4.
¿Es necesario responder a la pregunta de si estamos ante una buena serie? Es que nos da hasta pena porque no vamos a dejar títere con cabeza...
NO, definitivamente NO es una buena serie sino una fantochada que se las da de interesante y se queda en impotente. Volvemos a respirar el peor tono coñístico de 'Friends', con una forzada Aniston con calzador, la risa con sacacorchos, el fecaloma obstruyente que hay que retirar con kilos de vaselina...
CRÍTICA CEC SERIES
'The Morning Show' es el programa que despierta a América. Sus presentadores, Aniston y Carell, despues de 15 años de pareja ficticia, siguen desprendiendo magia. El trabajo diario, las largas horas en los estudios de televisión y la improvisación quedan expuestos a los ojos del público.
¿Quieren descubriros los secretos del directo? Nos gusta la idea así que, a pesar de las reticencias mostradas antes de empezar la serie, rompemos nuestras barreras mentales y nos auto-predisponemos positivamente a recibir, con los brazos abiertos, el mensaje de The Morning Show. ¡Y una sonrisa!
Una madrugada cualquiera, Aniston queda informada de que su compañero (Carell, con el que disfrutamos de verdad en 'The Office') ha sido despedido por acoso sexual. La noticia corre como la pólvora, y del día a la mañana se encuentra sola ante la cámara intentando salvar la situación. Mientras tanto, Reese Witherspoon (que interpreta un papel de reportera beligerante que nos creemos a duras penas), es grabada perdiendo los papeles en una protesta delante de una mina de carbón en contra de su voluntad.
Aprovechando la actualidad de ambos hechos, con los jefes de la cadena dispuestos a sacarle pelos a una calavera y montar un circo de cualquier cosa, sin escrúpulos ni miramientos invitan a la Spoon al programa de Aniston para discutir sobre el incidente. Con el trono de Carell vacío, la reportera habiendo dejado su trabajo, y la manifiesta enemistad estas ambas mujeres frente a las cámaras, ya sabemos por dónde irá el resto de la temporada sin siquiera haberlo visto. Previsible, aburrida... en definitiva, un coñazo más que sumar a la lista de Apple TV+, que en su precipitada carrera hacia el estrellato se ha pegado un guarrazo (en nuestra humilde opinión, claro está).
En el caso que nos ocupa, pequeño guiño a nuestros lectores de pecho henchido, la combinación de diálogos potencialmente profundos se ven empañados por unas patéticas sobreactuaciones de la mano de Aniston especialmente pero que Billy Crudup apoya a cada enfoque de cámara y cuya globalidad se vuelve asquerosamente empalagosa.
Por su parte, Reese Witherspoon mantiene larvado su potencial y parece obstinada en desaprovechar su talento. ¡Que así sea! Imaginamos que las chuminadas ficticias se cotizan mejor en la bolsa de empeños que en los suburbios de las memorias del subsuelo.
Finalmente está Mark Duplass, al que apreciamos particularmente por su papel en 'Togetherness' de HBO. No obstante, su paso por el show matutino pasa totalmente desapercibido y queda diluido entre tanto aspaviento histérico, muecas exageradas que nos dejan mudos de ira y la sonrisa inicial de capa caída y asomada al abismo de la carcajada.
Aniston, pasan los años y aunque parezca que las arrugas te confieren una sobriedad, sube el precio del pan cada vez que abres la boca. Impulsada por una trayectoria lamentable que te valió toda su posterior fama gracias al personaje interpretado en "Friends", Rachel, y esa manera de actuar de los 90 que nos atiesa...¡los vellos!. A parte de eso y del pequeño y humilde milagro de 'The Good Girl', nada más has hecho, y deberías dedicarte a producir más que a actuar o dirigir porque sigues siendo un desastre. Por favor Aniston, retírate de delante de las pantallas, que ya está. No das para más.
El empoderamiento de la mujer así como su paralela puesta en duda no cuelan en una comedia de tres al cuarto interpretada por bufones del entretenimiento. Asimismo, ¿cómo pueden cambiar las mentalidades y avanzar hacia una evolución si tiramos de modelos estilo Aniston que jamás han salido de su zona de confort en lo que conciernente a sus carreras profesionales?
Una sarta de chorradas que nos ponen a mil, como habréis podido comprobar, y de las que ni siquiera nos apetece hablar porque son patéticas, ridículas y asquerosamente inútiles. La serie es un desastre de la A a Z y, por si no ha quedado claro, el reparto es un agujero en los presupuestos de la nueva plataforma que suponemos que había que justificar de algún modo.
Hay que cambiar de modelos y, sobretodo, de referentes. Lo que marcó una tendencia en los 90 tiene que ser regenerado, y que a cada uno le caiga su merecido.
Insoportable.
