The Conscience (Photo credit: Wikipedia)
La consciencia. No sabemos bien lo que es, pero sí sabemosque es como una espátula de nuestro entendimiento que quita y arranca las capas de artificialidad que nos rodea, un socavador inclementeque, sin la menor indulgencia, quita las capas de roña que tiñen nuestra existencia.
Sí, su alcance es salvaje, y a veces dramático, pues esta espátula intentará meter su hocico absolutamente en todo lo que sea capaz de observar, ver o pensar, metiéndolo sin clemencia incluso en las cuestiones más profundas y misteriosas que rodean la existencia humana, como son la muerte, la eternidad, el devenir, etc...
De la misma manera que también lo hará en cuestiones más mundanas referentes a la propia vida como pueden ser el amor, la estupidez, el dolor, la religión o cualquier otra cosa de la atmósfera que nos imbuya...
Nuestra consciencia será buena o malasólo en relación a lo que ésta sea capaz de aportarte, o sea, a la capacidad de dignidad, goce, contento o incluso despertar espiritual.
Lo más común en una sociedad como la nuestraserá que tu consciencia te haga una persona que piensa con claridad y de manera autónoma, un poco guasón, lo que se llama un pragmático irónico, hipercrítico con toda la estupidez que te rodea y que, además, te vayas conviertiendo en eso que se llama mejor persona, o sea, una persona que acostumbrará a no ir jodiendo la vida a los demás, haciéndotela a la vez más agradable a ti mismo.
Sí, definitivamente, la consciencia es tremenda, salvaje y puede también convertirse en tu peor enemigo si uno no es capaz de transcender su salvajez en algún tipo de elixir benéfico que nos aporte algo importante.
la misura del danno subito (Photo credit: [auro])
Pero ¿qué ocurre si por casualidades de la vida colocan dentro de tu mente un martillo compresor potente de consciencia? Pues que, dado su excesivo celoy su excesiva precaución para todo, o te quedas bloqueado y ni te mueves, o acabas volviéndote el tipo más irónico del mundo, o valoraras como nadie lo realmente importante de la vida, como puede ser el amor y la fraternidad, o como última opción, te suicidas por despecho y desprecio al mundo...
"¡¡Venga René !! Tú que eres un maestro de la consciencia ¿nos pones un ejemplo?"
Está bien, de acuerdo. Tu coges una revista de esas de moda en la que unas féminas en actitud de pose lucen sensuales cuerpos y tiernas miradas, y todo ese circo, que es simple pose y que para la inmensa mayoría de personas será motivo de embeleso, admiración y deseo. Pues bien, la socavadora consciencia, tan dada a arañar todo lo que de artificial recubre al ser humano, identificará esto como algo ''artificial'' y, en un puro acto de realismo, cogerá esa imagen de esa niña mona que en la foto actúa como si fuera ''matadora'' y la retocará en tu imaginario diciendo: "¡¡,SÍ, mucha pose, pero detrás de esas poses en las que luces culito anunciando perfume de moda, aunque no lo aparentes, esta mañana te has pedorreado en el WC de lo lindo hasta que por fin has echado una ''ñorda'' de kilo y medio, por ese lindo y sugerente culito que hace unas horas olía a peste pura, como lo ha hecho todo hijo de vecino, creando así la consciencia una imagen más realista y adecuada a la auténtica realidad, desmitificando lo artificial y falso que la falsa artificialidad crea.
Esto ocurrirá así con todo, pues la consciencia busca siempre en uno mismo lo real y, por su propia naturaleza,no puede dejar jamás de quitar roña y falsas capas de irrealidad de lo que es capaz de observar.
Pero la consciencia no es tan cabrona como a priori pueda parecer , pues actúa también de manera muy positiva e inocentey así, por ejemplo, en un encuentro real entre un hombre y una bella mujer, al no ser ya una situación artificial (en teoría) sino una realidad, la consciencia, como sumamente respetuosa que es con toda realidad que lo aparente, sí será en este caso capaz de embelesarse con la fémina y sus bellas poses, llegando, por qué no, a jugar inocentemente como nadie, a ese teatro tan humano que es la seducción, un teatro tan real como la vida misma .
Claro, la consciencia tiene todo esto y más, y esta actitud la mantendrá absolutamente en todo, socavando los privilegios de los poderosos, cuestionando profundamente la política, la economía, el dinero, etc, observando la realidad social y económica de manera clara y nítida, pero siempre según su propia experiencia y entendimiento, y no por las palabras o eslóganes de segundas o terceras personas.
La gran pregunta entonces es: ¿es buena o mala la consciencia (obviamente hablamos de conciencia pura y dura)?
Pues la respuesta es: depende. Depende de lo que entendamos por bueno y d lo que entendamos por malo, pues por ejemplo la consciencia no evitará ni por asomo que sufras, sino que puede que incluso sufras más por su culpa, debido que a través de, por ejemplo, el amor, crearás grandes apegos y, por ende, tendrás que pagar su precio.
Un dolor que contribuirá en el proceso de aprendizaje de uno mismo, si es que el dolor en sí es capaz enseñar algo, pero ese es otro tema. Por contra, sí te ahorrarás toneladas y toneladas de tóxica estupidez altamente dolorosa.
A lo que vamos: ¿es buena o mala la consciencia ?.
Repito: depende de lo que a la práctica sea capaz de enseñarte esta...
¿Son buenas o malas las drogas? Pues si te sientan bien no son malas, el hecho objetivo es que obviamente las drogas acaban sentándote fatal, destrozandote psíquica y físicamente y haciéndote muy probablemente un poco más idiota, por lo tanto éstas no parecen que sean buenas del todo, pero quien sabe, a lo mejor un día inventan drogas que te colocan y además le sientan de maravilla a tu organismo, incluso te hacen mejor persona, pero de momento las que hay, te joden la vida a largo plazo...
A lo que íbamos: ¿es buena la consciencia o no es buena?
Lo que sí os aseguro es que es autónoma, y que no podrás hacer nada si se desarrolla en ti este martillo percutor que es la consciencia, y por una parte puedes estar bien jodido pues no hay término medio y puede que te conviertas en un terrorista o en un santo, o lo más normal es que puede que te transformes simplemente en una buena persona que, creyéndose muy listo, pueda acabar con el tiempo pervirtiéndose, dedicándote, por ejemplo, a la política o ejercer cualquier otro tipo de poder.
O puede, como en el caso primero, que tu consciencia martillee tanto sobre las injusticias, si tu vida o la de tus seres queridos, o simplemente la de tus semejantes llega a mancillarse, que a tal efecto decidas llevarte por delante a los que te han matado a tus hijos o aquellos que te someten o humillan en vida, o que, para luchar contra esto, hagas de ello la causa y sentido de tu vida.
El otro caso es igualmente circunstancial y puede que tu consciencia te lleve a un nivel infinito de amor hacia la humanidad y acabes convirtiéndote en un santo, cosa muy muy aconsejable, y no es broma.
Lo más común en una sociedad como la nuestra, de momento sin dramáticos avatares, será que tu consciencia te haga una persona que piensa con claridad y de manera autónoma, un poco guasón, lo que se llama un pragmático irónico, hipercrítico con toda la estupidez que te rodea y que, además, te vayas conviertiendo en eso que se llama mejor persona, o sea, una persona que acostumbrará a no ir jodiendo la vida a los demás, haciéndotela a la vez más agradable a ti mismo.
Muchas gracias por tu atención y muchas gracias por esta pagina de opinion para muy pequeñas minorías, pocos se ocupan ya de que unos pocos podamos deleitarnos en pensar en las cosas que al final realmente importan.
La gente sólo llora cuando le pasan las cosas malas, pero es que antes hay que estar informados y pensar un poco. Ese es otro buena tema, no crees? Estoy harto de protestas cuando ya no queda más remedio, sin antes haber pensado.