Sigue confirmándose que HBO se apunta al "CANTIDAD vs. CALIDAD" para poder competir con Netflix
Teresa (Victoria Guerra) recibe la noticia de que su hermano Paulo es hallado muerto, un domingo por la mañana, en el puerto en el que trabaja. El sábado estuvieron juntos y éste recibió una llamada de un supuesto compañero que le solicitaba un cambio de turno al día siguiente por la mañana. Entonces se produjo la catástrofe y los indicios apuntaban a un suicidio.
Una investigación liderada por Gabriela Ferreiro (Cristina Iglesias) y el inspector Luis Viñas (Sergio Pazos) se pone en marcha. A medida que se van adentrando en las sombras del enigmático suicidio de Paulo, irán saliendo los trapos sucios de la familia Gabaldón, un potente grupo empresarial en el que Mauro (Monti Castiñeiras) e Irene (Eva María Fernández) saben más de lo que cuentan, utilizando todos los medios a su disposición para una finalidad más que dudosa.
CRÍTICA DE LA SERIE AUGA SECA HBO ESPAÑA - CEC SERIES
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"Auga seca" es un thriller que gira en torno al tráfico de armas y sus conexiones con el mundo empresarial. Las sugerencias finales del documental "La pesadilla de Darwin" son tomadas como los pilares iniciales de esta serie, cuya temática nos parece más que interesante. Todo lo que sea la denuncia de los teje-manejes empresariales siempre será de nuestro agrado.
Ahora bien, adentrémonos en la sequedad de estas aguas que no parecen fluir con toda la soltura que requeriría...
El guion está mal engrasado, y chirría -sobre todo- en la gestión de los tiempos. Un ejemplo: Teresa vio a su hermano el sábado, lo encuentran muerto el domingo. Teresa se desplaza hasta Vigo, y cuando llega al apartamento de Paulo le dice a la policía que éste le entregó las llaves "el otro día". El otro día que fue ayer. Es un detalle, sí, pero a nosotros nos desconcertó y tuvimos que parar para recapitular.
A partir de ese punto, uno saca inconscientemente la lupa y el elemento temporal pasa a ser básico. Es más: sin hacer spoilers, los tiempos tomarán mucho protagonismo en la ficción, con lo cual es necesario estar impecablemente concebida a este nivel. Apuntamos, pues, que las noches y los días no están bien dominados, conformando una de las flaquezas de "Auga seca".
Pasemos a los personajes y la total falta de carisma de los actores. ¿Dirección? ¿Interpretación? ¿Guion? No sabemos quién es el culpable porque ese no es nuestro trabajo, pero sí podemos afirmar que a pesar de la cautivadora temática, su desarrollo resulta de una monótona planicie incapaz de registrar el menor ápice de buena intriga, interés o seducción.
HBO no es la televisión pública ni generalista, y se espera de sus productos una cierta calidad "premium". Al igual que afirmamos en el momento en que nos dimos de bruces con ese engendro llamado 'Avenue 5', parece que se confirma la línea cantidad vs calidad para competir con Netflix. 'Auga seca' es, lamentablemente, un producto muy justito para formar parte de su catálogo.
No solo la temática del tráfico de armas cuyo desarrollo es liso y sin complejidad aparente más que la del propio intrincado que le viene de serie.
Sí tenemos que aplaudir el nivel de simplificación con el que relatan una enrevesada realidad, pero totalmente carente de chispa. Terminamos el capítulo 3 aburridos de ver a Teresa jugando a los detectives y asqueados de tanto abrazo, saludos de ida y vuelta, el adiós, el pésame de entrada y de salida... Agotados. Queremos más chicha.
¿Cuál es verdaderamente el mérito de Auga seca? ¿Denunciar el tráfico de armas, o el hecho de que sea la primera serie en gallego que aterriza en HBO? ¿Tiene relación lo uno con lo otro? Y de ser así, ¿no podría haberse hecho mucho mejor? Seguro que sí, sabemos que sí...
El conjunto es demasiado flojo con el consiguiente aburrimiento en que deriva. No esperábamos tiros, violencia ni acción, pero sí un mínimo de complejidad en los diálogos. Y no que se limitara a un sencillo caso de homicidio con el tráfico armamentístico de fondo, sino un caso de tráfico con la excusa del homicidio.
