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Queremos creer en el valor metafórico de betaal
La terrorífica producción India 'Betaal' es una buena manera de pasar una velada de sobresalto. Sinceramente, estamos muy sorprendidos del resultado a pesar de que este tipo de ficción no suela gustarnos.
4 capítulos de 45 minutos (disponibles en VOSE en Netflix España) narran los acontecimientos sucedidos en un remoto pueblo cuando éste se ve convertido en un campo de batalla entre los habitantes, el ejército indio y un batallón de zombies británicos en la India.
Todo es consecuencia de la acción de una empresa de construcción que, movida por la codicia de su propietario, cimenta una carretera para unir un remoto pueblo con la civilización. No queda claro quién contrata ni el porqué... ¿Qué interés puede tener una aldea perdida en la montaña?
La obra amenaza con desplazar a los autóctonos de la montaña Betaal, guardianes de un túnel que alberga el corazón aletargado de una maldición: la que se apodera del cuerpo de las personas hasta pudrirlo y tomar el control de su alma... Sí, los clásicos zombies también existen en la India.
La apertura del túnel despertará al enemigo: el batallón de zombies de la Compañía de las Indias Orientales que se enfrentará al escuadrón de soldados modernos liderados por la comandante Tyagi (Suchitra Pillai) y su segundo al mando, Vikraam Sirohi (Viineet Kumar).
crítica de la serie BETAAL (Netflix): Terror y Zombies
Pocas similitudes hallamos con los cuentos del poeta de Cachemira Somdev Bhatt en los que parecía inspirarse esta serie. El ser mitológico Betaal enfrentado al rey Vikram es, en esta adaptación televisiva, una metáforica y clásica confrontación entre el Bien y el Mal.
En este caso, el soldado Vikram es el representante de la India libre que se enfrenta al zombie coronel Lynedoch (Richard Dillane): una alegoría de la labor colonizadora que los británicos llevaron a cabo anexando gradualmente el país desde principios del siglo XVIII.
Los británicos no solo se hicieron con el territorio, sino que sometieron las mentes de sus gobernantes para dominar al pueblo. Como Lynedoch con Tyagi y posteriormente con Vikram, fueron escalando estratos hasta hacerse con el poder.
Sín embargo, la avaricia rompe el saco: un superhombre puede vencer a los espíritus malvados (léase pasiones animales) y tomar las riendas de la situación, pero puede costarle la vida.
Igual que la lucha por la independencia, "Betaal" derrama litros de sangre, tripas al aire y algún que otro inesperado sobresalto.
Un ejército de zombies menos atolondrados de lo que acostumbran, pero tan desfigurados como cabría esperar. Ellos son los protagonistas de esta pesadilla de serie que, como entretenimiento, sirve de maravilla.