Esta serie trata de investigar la desaparición de una adolescente Julia (Alvilda Lyneborg Lassen) en determinadas circunstancias 6 meses antes del punto en el que se situa la serie. Es el pretexto y casilla de salida para ir tirando del hilo hasta sumergirnos de pleno en este oscuro thriller criminal. Otra chica de edad y perfil parecidos Emma Holst (Tessa Hoder) es secuetrada y todo indica que el criminal es el mismo.
El detective Jan Michelsen (Kenneth M. Christensen) es el encargado de investigar la desaparición de Julie, una adolescente de 17 años perdida hace más de medio año en un suburbio de Copenhague. El descubrimiento del cuerpo de una joven de edad similar, Natasha, desaparecida una década atrás hace que Julie se dé por muerta siendo Jan el único que cree que la chica sigue viva y que hay un asesino en serie detrás de las muertes.
Junto a la criminóloga Louise Bergstein (Natalie Madueño ya anteriormente consultora externa) iran desenmarañando una serie de acontecimientos tan contradictorios como escabrosos. Louise será la encargada de adentrarse en la mente del asesino, entender su conducta, su personalidad para poder identificarlo.
El spin off de "Those who killed" ("Den Som Draeber") titulado "DARKNESS: LA HUELLA DEL CRIMEN" (o para los puristas "Den som dræber - Fanget af mørket") tiene el mismo interés que su serie madre: ninguno. La principal fuente de atracción de ambas es la morbosa y cruel naturaleza de los crímenes expuestos. En el primer caso no estaban planteados con la necesaria crudeza y quedaban aguados precisándose un momento de reflexión para entender la profundidad, el rigor y la sangre fría necesarias para llegar a perpetrar semejantes perversidades.
En el caso del spin-off se han pasado de rosca con la perfidia causando una animadversión y repulsión que el equipo Cec Series desaprueba. Cuando se trata de entretenimiento sin otro fondo que el de dar con el zumbado que anda suelto el abuso del morbo es pornográfico. Ocho episodios de unos 45 minutos de duración donde el sociópata y asqueroso personaje de Mads Riisom, Anders Kjeldsen, logra repugnarnos con excelente maestría. La brutalidad es tal que debemos apartar la mirada de la pantalla en más de una ocasión. Tanto si este personaje está inspirado en alguno real como si no, la mente del humano está enferma.
Los demás protagonistas siguen una línea acorde al género. Los mismo estereotipos, casos flagrantes de "workaholismo" de aquellos seres solitarios que rellenan el tiempo tomándose como personal y muy a pecho una búsqueda que no depende de uno mismo. El presupuesto del cuerpo de policía, como ya se indica al principio, es una de las principales razones por las que Jan es destinado a otro caso. Pero su honestidad y el haber prometido a la familia de Julia que encontraría a la niña le hacen persistentemente irreal. Louise por su lado es un personaje igual de trillado y llano que se dedica a dar soporte a víctimas de abusos, violencia de género y mujeres maltratadas.
Algunos diálogos derivados de las sesiones de grupo se pueden rescatar pero resultan demasiado breves para justificar el visionado de la serie. Una línea paralela pero insignificante se traza entre los casos y el soporte a las víctimas.
Él soltero, ella soltera... el roce hace el cariño, las largas horas escarbando en mentes ajenas, compartiendo donuts, mañanas de sábado en la oficina, incursiones nocturnas bajo un pretexto ridículo, todo apunta a LIO ASEGURADO. No lo sabremos, no llegaremos tan lejos.
Muy nórdico y muy "noir" con todos los ingredientes necesarios para que los amantes de los paisajes norteños combinados con lo policial se sientan satisfechos de este cóctel molotov. Sin lugar para la duda, esta es una producción tenebrosa y extrema.
Ahí lo dejamos, aunque sea danesa y nos encanten las escandinavas... no nos confomamos con cualquier cosa.